Tras recorrer en tres días 5,689 kilómetros, el 19 de septiembre de 1984, el aviador y oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, Joe Kittinger, se convirtió en la primera persona en cruzar en solitario el océano Atlántico en un globo de gas.
Según cuentan las crónicas del momento, el viaje de Kittinger fue una auténtica odisea. Los fuertes vientos amenazaron con dar al traste con la empresa, pero Kittinger logró aterrizar el globo en las proximidades de la localidad italiana de Savone, a pesar de que las malas condiciones meteorológicas hicieron que el globo se posara sobre la copa de un árbol.
Kittinger salió de Caribon, en el estado de Maine, en los Estados Unidos, el 14 de septiembre y con este viaje incluso batió el récord de distancia, para la fecha, cubriendo 5,689 kilómetros en 84 horas de vuelo.
Kittinger también formó parte del proyecto Excelsior, como parte de la investigación de saltos a grandes altitudes. Protegido con un traje presurizado, realizó una serie de tres saltos en paracaídas desde un globo de helio con una góndola abierta.
El 16 de agosto de 1960, Kittinger realizó un salto desde el Excelsior III a 31.333 metros. Durante una caída libre de algo más de cuatro minutos alcanzó una velocidad máxima de 988 km/h antes de abrir su paracaídas a 5.500 metros de altitud. Kittinger consiguió y mantuvo los récords de mayor ascenso en globo, salto en paracaídas de mayor altitud, caída libre más larga y mayor velocidad de un hombre en la atmósfera hasta el 14 de octubre de 2012 cuando sus marcas –excepto la de caída más larga– fueron superadas por el paracaidista austríaco Felix Baumgartner, que saltó desde los 39.068 metros de altura.
(SINC)