México ocupa el primer lugar mundial en embarazos adolescentes, situación que se ha tornado más compleja debido a la falta de información y el inequitativo acceso a los servicios de salud, señaló Adriana Soto Andalón, representante del Instituto Nacional de las Mujeres en el Distrito Federal, quien participó de la 7ª Semana de Salud Sexual Entre mitos y realidades promovemos responsabilidades, celebrada en la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
En su conferencia Mitos y realidades: las brechas de género en la salud sexual explicó que, en pleno siglo XXI, la primera relación sexual se realiza en promedio a los 16 años y que de acuerdo con estadísticas recientes se registran en México 360 mil nacimientos anuales, de los cuales 41 por ciento podría corresponder a embarazos no planificados o no deseados.
Soto Andalón consideró que no obstante la amplia información, los jóvenes sienten pena de ir a comprar condones porque son cuestionados por su sexualidad o simplemente no tienen dinero para comprarlos, por lo que les es más simple no protegerse.
Señaló que las relaciones de género en México no son equitativas y las mujeres se encuentran en una situación de discriminación, que pone en riesgo su salud y su vida.
Esta discriminación resulta de la diferencia de sexos, la condición laboral, el nivel socioeconómico, etnicidad, edad, región geográfica y orientación sexual que lleva a una situación ya tipificada como la violencia obstétrica, donde las mujeres en trabajo de parto son agredidas por personal médico.
De seguirse los principios de equidad y eliminar la disparidad, se disminuiría la aún presente mortalidad materna que se presenta en 43 mujeres por cada mil nacidos vivos por complicaciones en el embarazo, parto y posparto y de las cuales cerca de 10 por ciento era menor de 19 años.
La licenciada Margarita Pompa Alarcón, jefa de la Sección de Orientación Educativa y Servicios Pedagógicos, instancia organizadora de esta jornada, señaló que el objetivo de la 7ª Semana de Salud Sexual Entre mitos y realidades promovemos responsabilidades, es hacer conciencia en los alumnos de que forman parte de este sector y que corren el riesgo por embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual, por lo que para prevenir hay que dejar a un lado prejuicios, doble moral y asumir la obligación de cuidarse.