La marca nacional Bexoo, ofrece una experiencia gourmet de la cocina prehispánica mexicana, especializándose en la venta de insectos comestibles y productos derivados de éstos. Resultado del Sistema de Incubadoras de Empresas InnovaUNAM, suministran desde sal de gusano, escamol, chinicuil, gusano de maguey, chapulín hasta alacrán.
Roberto Celis Montenegro, representante de Bexoo detalló que suministran -además de los ya mencionados- el cocopache, es decir una chinche de planta y caracoles a granel. Además innova la cocina mexicana con la producción de salsas, pastas, mermeladas y helados.
Los insectos comestibles contienen diversas propiedades nutricionales en comparación con la carne de vaca y el pescado. En México habitan 549 especies; por ello Bexoo busca recuperar y promover su consumo, además de impulsar una producción sustentable.
“Por ejemplo en un helado de queso con mermelada de chapulín, no se ve el insecto, es más fácil su consumo y sobretodo rico en proteínas, es decir si le das una bola de esta nieve del insecto a un niño, es como si le estuvieras dando un bistec, se lo comerá con gusto y le aportará nutrientes”, enfatizó Celis Montenegro.
Es importante saber que durante la elaboración de los productos derivados, el insecto no pierde propiedades nutricionales, ya que lo emplean en crudo con el objetivo de que los mantengan, proporcionando así, grandes cantidades de proteínas y grasas que el cuerpo humano absorbe más rápido que las de origen animal y nula existencia de hormonas, toxinas y enfermedades transmitidas al consumidor.
La producción de insectos es sustentable al ocasionar cifras inferiores de gases de efecto invernadero comparados con los del ganado convencional. Por ejemplo los cerdos producen entre diez y cien veces más gases por kilogramo de peso, esto contamina el medio ambiente.
Bexoo es la marca mexicana con más trabajadores capacitados en la recolección de escamoles y gusanos de maguey, además cuenta con la infraestructura y el personal para minimizar la pérdida durante la comercialización de los insectos, asegurando calidad en el producto.
“Mi primer compromiso es con la UNAM, mi alma máter; después con la sociedad, la ecología y sustantividad de nuestros productos. Así, en 2010 mi gusto por los escamoles me impulsó a crear la marca ‘Bexoo’, además de percatarme de la necesidad en el mercado de tener un proveedor con normas de calidad. Me enteré de la convocatoria, me acerqué al sistema de incubadora de empresas y poco a poco lleve a cabo el proceso para fundarla. Siempre tuve en mente ‘El no ya lo tienes, busca el sí’, eso me ayudó a seguir en pie con el proyecto”, agregó el también egresado de la Facultad de Contaduría y Administración de la máxima casa de estudios.
Con dos años en el mercado, Bexoo busca consolidarse como la principal marca distribuidora de insectos. “Creemos que si fomentamos y rescatamos el consumo de escamoles, chinicuiles y los demás insectos que vendemos, estaremos cumpliendo con la recomendación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de consumir alimentos ricos en proteínas, que no contaminan y que, además, proporciona una fuente de empleo a campesinos”, dijo.
Asimismo, la empresa incubada en la UNAM, pretende exportar la distribución a granel y de sus productos derivados en Europa y Sudamérica.
(Agencia ID)