Las células madre de la grasa extraída durante una operación de corazón que se va a desechar pueden mejorar la función cardiaca, según un estudio que será presentado en el congreso Frontiers in CardioVascular Biology (FCVB) 2014 celebrado en Barcelona, España. El congreso ha sido organizado por el Comité de Ciencias Cardiovasculares Básicas de la Sociedad Europea de Cardiología (SEC) en colaboración con 13 sociedades de ciencias cardiovasculares europeas. http://spo.escardio.org/SessionDetails.aspx?eevtid=65&sessId=13301&subSessId=3484
El Dr. Ganghong Tian, autor principal del estudio, afirmó: ‘»Durante las operaciones cardiacas, puede ser necesario extraer tejido adiposo de los pacientes para dejar expuesto el corazón. Nos intrigaba saber si esta grasa mediastínica que en otro caso se desecharía contenía células madre que pudieran volver a inyectarse en el corazón antes de cerrar el pecho. La idea era mejorar la función cardiaca después de un ataque al corazón o un fallo cardiaco'».
El Dr. añadió: ‘»La llegada de la liposucción para extraer grasa no deseada del cuerpo llevó a investigar las células madre de la grasa subcutánea. Se ha demostrado que estas células mejoran la función cardiaca, reducen la gravedad del infarto de miocardio e incrementan la regeneración de nuevos vasos sanguíneos. Pero obtenerlas de un paciente que se va a operar del corazón requiere extraer tejido adiposo de la región subcutánea antes de la intervención quirúrgica'».
El Dr. Tian continuó diciendo: ‘»Lo bueno de utilizar el tejido adiposo mediastínico es que no es necesario volver a operar. Nuestro método convierte el tejido inservible en un tratamiento. Utilizar el tejido del propio paciente evita la posibilidad de que su sistema inmune rechace las células madre'».
El objetivo de este estudio era descubrir si las células madre podrían aislarse del tejido adiposo mediastínico, diferenciarse entre distintos tipos de células y mejorar la función cardiaca. Los investigadores extrajeron tejido adiposo mediastínico de 24 pacientes durante una operación de corazón. Las células madre se aislaron del tejido mediante un procedimiento estándar.
Los investigadores descubrieron que se podía aislar un número significativo de células madre del tejido adiposo mediastínico. Las células madre de los depósitos de grasa mediastínica y subcutánea pudieron diferenciarse entre adipocitos y osteocitos, y expresaron marcadores de cardiomiocitos. El Dr. Tian afirmó: ‘»No hemos podido transformar las células madre de ninguna de las regiones en cardiomiocitos pulsátiles. Este es el futuro objetivo de nuestro trabajo'».
La posibilidad de que las células madre del tejido adiposo mediastínico mejoren la función cardiaca se probó en un modelo de insuficiencia cardiaca congestiva en ratas, que se creó ocluyendo la arteria coronaria descendente anterior izquierda. Las células madre se inyectaron en la zona infartada de 13 ratas, mientras que 5 ratas recibieron una solución salina a modo de control.
Seis semanas después, una RM mostró que las células madre de la grasa mediastínica habían mejorado la recuperación funcional del corazón en comparación con la solución salina. Las ratas a las que se inyectaron células madre de grasa mediastínica no presentaron disminución en la fracción de eyección ventricular izquierda y mostraron una contractilidad ventricular significativamente mayor.
El Dr. Tian afirmó: ‘»Se trata de la primera evidencia de que las células madre extraídas de la región adiposa mediastínica son cardioprotectoras. Mostraron la misma capacidad cardioprotectora que observamos en nuestros anteriores estudios sobre células madre extraídas de tejido adiposo subcutáneo. Esto plantea la interesante posibilidad de utilizar las células madre de un paciente, aisladas del tejido residual durante una operación de corazón, para mejorar su función cardiaca.'»
El Dr. añadió: ‘»La siguiente fase de nuestra investigación consistirá en prolongar el periodo de recuperación más allá de las 6 semanas para comprobar si estas células madre pueden mejorar la función cardiaca a largo plazo. También trabajaremos para inducir la transformación de células madre en cardiomiocitos funcionales que suministren impulsos eléctricos y función contráctil (latido)'».
Continúa diciendo el Dr. Tian: ‘»También se necesita una técnica con la que aislar rápidamente las células madre del tejido adiposo mediastínico para que las células puedan volver a inyectarse en el paciente durante la cardiocirugía. Actualmente se tardan varias horas en purificar las células y estamos buscando colaboradores que nos ayuden a idear un método más eficaz'».
Y concluyó: ‘»El objetivo de la cardiocirugía es tratar la insuficiencia cardiaca o restaurar la circulación sanguínea normal en el corazón. El principal punto fuerte de nuestro estudio reside en el hecho de que utilizamos tejido residual para aislar las células madre del propio paciente. Volver a inyectar estas células en el paciente mientras su pecho sigue abierto le proporcionaría básicamente un doble tratamiento durante una única operación y mejoraría sus posibilidades de recuperarse de la cardiopatía isquémica'».