Entre los deportistas universitarios, no son las mujeres, si no los hombres quienes sienten mayor preocupación por los aspectos de “belleza” del cuerpo, como la apariencia de los ojos, las manos, la nariz y otros aspectos de ese tipo, según revela el estudio “Imagen Corporal en Atletas Universitarios Mexicanos”, elaborado por el doctor Gabriel Gastélum Cuadras, de la Universidad Autónoma de Chihuahua, quien busca medir el nivel de ansiedad que sufren los deportistas universitarios ante su imagen corporal.

Pero el problema de la imagen corporal también incluye a los entrenadores, los cuales buscan que le joven atleta tenga una figura que le permita un mayor rendimiento en el deporte que desarrolla, sin cuidar su bienestar físico y de salud, puntualizó,.

En este sentido enfatizó que “entrenador que no educa, que no forma, no es un buen entrenador aunque logre muchas medallas”, porque lo primero debe ser cuidar la salud y el bienestar de los jóvenes deportistas.

Gabriel Gastelum es doctor por la Universidad de Granada, donde precisamente se graduó con una tesis sobre el “Desarrollo y validación de una versión informatizada del Body Image Anxiety Scale y Contour Drawing Rating Scale: Un estudio sobre percepción y nivel de ansiedad de la imagen corporal en universitarios”.

Con ese antecedente inicio una investigación para determinar  la ansiedad por la  imagen corporal de atletas universitarios mexicanos, para lo cual tomó 250 deportistas de elite (que asistieron a la Universiada 2010 realizada en Chihuahua), 110 mujeres 140 varones, de las regiones Norte, Centro y Sur de México, de diferentes disciplinas deportivas, a quienes se les aplicaron las escalas experimentadas para la elaboración de su tesis doctoral.

Los resultados mostraron que la imagen que tienen los atletas universitarios de si, sufre las influencias de la moda, lo que también les causa niveles de ansiedad al no estar en los estándares que consideran los adecuados, provocándose trastornos sicológicos.

“Estamos en tiempos en que es más importante la envoltura que el regalo mismo”, señala, y refiere que diversos estudios internacionales muestran que esto lleva a niveles de estress y ansiedad a los deportistas universitarios, aún cuando su condición física sea óptima.

Para delimitar lo que es la “imagen corporal” toma la definición realizada por los autores Sophie S. Banfield y Marita P. McCabe en su trabajo publicado “An evaluation of the construct of body image” en el sentido de que “la imagen corporal es la representación mental que tienen los individuos del tamaño y forma de su cuerpo, la cual está influenciada por una variedad de factores históricos, culturales, sociales, individuales y biológicos. Para estos autores, la imagen corporal incluye aspectos de percepcetivos, cognitivos, afectivos y conductuales”.

Pero también menciona que aún cuando la “autoimagen” es individual, ésta es moldeada en gran medida por el medio social en que nos desenvolvemos, por lo cual “tampoco se le puede ni debe considerar como algo estático o acabado, debido a que los propios elementos antes mencionados son cambiantes en el tiempo y en el espacio”.

Estos estereotipos, refirió, también afectan a la población en general.

Así, la máxima que planteaba que “el deporte es vida y salud” quedó atrás, privilegiándose ahora el deporte de competencia y espectáculo, lo que lleva a que “el dualismo de la modernidad dejó de oponer alma y cuerpo; de manera más sutil opone al hombre a su propio cuerpo”, según apunte de David Le Breton, en “Sociología del cuerpo”, el cual es citado por el doctor Gastelum.

Este tipo de situaciones propicia la aparición de problemas entres los jóvenes deportistas universitarios, quienes también llegan a privilegiar su imagen corporal por encima de su condición física óptima o su buena salud, propiciando Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) que afectan tanto su rendimiento deportivo como su propia salud.

Para medir los niveles de ansiedad que enfrentan los deportistas universitarios utilizó las mediciones que utilizó en su tesis doctoral, las Body Image Anxiety Scale y Contour Drawing Rating Scale

La Body Image Anxiety Scale (BIAS) mide dos aspectos de la percepción de la imagen corporal: uno, peso, que incluye abdomen, caderas y cintura; y, dos, no peso (referido a la belleza), que incluye percepciones sobre nariz, cuello, frente, entre otros.

El resultado mostró que las mujeres son quienes se preocupan más por su peso, mientras que los hombres se inquietan más por los aspectos “estéticos” o de “no peso”: “este hecho seguramente no hubiera ocurrido hace cincuenta o sesenta años”, pero ahora se presenta el fenómeno inducido por la publicidad que manejan los medios masivos de difusión que presentan los estereotipos de lo que consideran la belleza física, tanto en hombres como en mujeres.

 

Los resultados del estudio

 

Los resultados preliminares muestran diferencias significativas entre mujeres y varones deportistas universitarios, siendo ellas quienes reportan mayor ansiedad relacionada con el peso corporal, tanto permanente como situacional, con lo cual se confirma que este aspecto, la variable género es muy importante, pues las mujeres sienten mayor demanda social a estar delgadas; la tendencia de que las mujeres tienden a sobreestimar el peso que tienen, mientras que los hombres lo subestiman, se mantuvo.

Un dato curioso, las mujeres se angustian más por su peso cuando están en la playa, en un 19 por ciento, mientras que los hombres su rango queda en el 13 por ciento.

El mostrarse en público es algo de lo que genera angustia a los deportistas, porque las mujeres muestran esta condición en un 10 por ciento cuando van al super, mientras que los hombres se ubican en un 7 por ciento, pero en cambio cuando están en casa, a las mujeres les preocupa sólo en un 5 por ciento y a los hombres un 4 por ciento.

En relación a la zona del país en que habitan dichos deportistas, se encontraron diferencias significativas sólo entre los del norte y los del centro de la república, siendo los del norte quienes manifestaron mayor ansiedad por su imagen corporal (21 por ciento), relacionada tanto al peso como a la belleza física, mientras que los del centro son los menos propensos a problemas con la imagen corporal (15 por ciento), en tanto que los del sur son más centrados (18 por ciento).

Por último, se analizaron a deportistas que hacen dieta y sus pares que no hacen dieta, los resultados muestran que precisamente los que hacen dieta son quienes presentan mayor ansiedad por su imagen corporal relacionada con el peso; en la dimensión relacionada a la belleza física no se encontraron diferencias significativas.

Gabriel Gastelum enfatizó la importancia de hacer esfuerzos institucionales de carácter preventivo, a favor de los deportistas más vulnerables en este aspecto, que son los que practican deportes de categorias (judo, boxeo, lucha), de gimnasio (culturismo, aerobi, fitness), de estética (gima¡nasia rítmica, ballet, patinaje artístico y danza) y de resistencia atletismo, natación, ciclismo).

 

El trabajo del doctor Gabriel Gastelum Cuadras en lo referente a los deportistas universitarios mexicanos aún está en preparación, pero su tesis se encuentra en http://hera.ugr.es/tesisugr/19489766.pdf

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