
Una investigadora de la Universidad de Bristol (Reino Unido), asociada al Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC), revela que, hace millones de años, el monzón asiático influyó en la evolución de las ratas topo y las ratas del bambú, ambas pertenecientes a la subfamilia de mamíferos Rhizomyinae. Según el estudio publicado en Scientific Reports, a partir de ese momento los roedores se adaptaron progresivamente a la vida subterránea.