Aunque el uso del biodiesel fomenta la sustentabilidad y el cuidado del medio ambiente, su costo de producción aún es elevado, incluso mayor que el del diesel tradicional. Según expertos, esa es una de las razones por las que existe incertidumbre acerca del éxito de ese combustible para abastecer al parque vehicular.
Sin embargo, emprendedores de la firma mexicana Der Tek, lograron obtener biocombustible con cualidades superiores a las del biodiesel tradicional. De acuerdo con Jonathan Hernández Díaz, director de la empresa, el producto de la firma comercial alarga la vida útil de la máquina del vehículo porque permite mayor lubricidad, ese factor impacta sobre la reducción del desgaste entre las partes del motor.
El emprendedor mexicano manifestó que a diferencia del biocombustible tradicional, que generalmente tiene alrededor de tres meses de caducidad, el producto denominado Biodinox tiene mayores propiedades de estabilidad oxidativa, que se traduce en un aumento en la vida de anaquel del producto.
“Al paso del tiempo, el biocombustible pierde propiedades y comienza a dañar los inyectores del vehículo. Lo que logramos fue ampliar esa vida de anaquel y permitir almacenajes mayores a un año”, manifestó el emprendedor politécnico.
Hernández Díaz destacó que la producción del producto Biodinox representa un modelo de negocio sustentable, que activa la economía de algunas regiones del país. “Hoy en día tenemos un modelo de negocio en el que ofrecemos a agricultores mexicanos que siembren nuestros productos y se conviertan en nuestros proveedores”, expresó el emprendedor.
El emprendedor agregó que en la búsqueda de materia prima que no compitiera con insumos alimenticios, el biodiesel de la empresa se obtiene a partir de especies silvestres no comestibles como la Higuerilla y Jatropha. Aunado a ello, esta materia prima orgánica detona 3 empleos directos y 5 indirectos por hectárea establecida, y actualmente se cultiva en algunas regiones de los estados de Puebla, Estado de México, Tlaxcala y Morelos.
Hernández Díaz mencionó que, en sinergia con ingenieros agrónomos y biólogos de instituciones de educación superior, se ha logrado una mejora de las semillas de Higuerilla y Jatropha para garantizar su consumo sustentable. Agregó que esas especies pueden ser aprovechadas para hacer uso de suelos que no son aptos para la siembra de productos para el consumo humano.