Sylvia Zárate
BOGOTA (Xinhua) –- La política colombiana Clara Rojas, quien estuvo secuestrada por las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por seis años, habló con Xinhua sobre su último libro “Cartas a Emmanuel”, en el que busca explicarle a su hijo de ocho años el conflicto interno en Colombia.
Rojas, quien fue liberada hace cuatro años y que ha recibido reconocimiento internacional por sus libros “Cautiva” y “A prueba de Fuego” (traducido a 13 idiomas), dijo que en su último trabajo quiso explicar de forma sencilla a su hijo Emmanuel y a las nuevas generaciones los profundos problemas de su país.
“Explicarle la complejidad del conflicto, quiénes me secuestraron, por qué me secuestraron, y que sepa porqué se da ese fenómeno en Colombia, y la única manera que se me ocurrió fue mostrarle una foto de la violencia del país en los últimos 60 años, a través de mi propia experiencia”, señaló.
La abogada fue compañera de fórmula vicepresidencial de la entonces candidata presidencial Ingrid Betancourt, también secuestrada y liberada.
Rojas fue secuestrada en 2002 y liberada en 2008 en una operación humanitaria denominada “Operación Emmanuel”.
Dijo que abordó el texto de una forma optimista, porque cree que así se facilita el acercamiento de los nuevos lectores.
Temas como las ideologías de izquierda y derecha, la toma del Palacio de Justicia por parte del grupo guerrillero M-19, la problemática del narcotráfico, la relación entre Colombia y Estados Unidos, y la influencia de líderes políticos como Jorge Eliécer Gaitán y Luis Carlos Galán, son abordados por la escritora en su libro.
Según Rojas, la forma de cambiar la realidad violenta de Colombia comienza con una participación real de la sociedad en la resolución del conflicto, y esto sólo se da en la medida en que todos comprendan bien la historia del país suramericano.
“Empezando a leer y a entender, acercarnos al problema más en el día a día, que todos hablemos de el, pensemos, proponiendo qué se puede hacer, es como cuando uno va a construir una casa, empieza a mirar los planos, el terreno, es aproximarse, pensar que vamos a hacer una construcción, acercarnos de una manera cognoscitiva”, precisó.
De igual forma, la colombiana quien dio a luz a su hijo en cautiverio y luego fue apartada de él por casi tres años, dijo que a pesar de tener la oportunidad de vivir fuera del país tras su liberación, escogió vivir en Colombia porque considera fundamental generar en su hijo un sentido de pertenencia y de identidad.
“Tuve la oportunidad de irme al exterior, pero también tuve la oportunidad de quedarme, y me quedé con la conciencia positiva de que para mi hijo era importante reforzar los lazos afectivos por encima de cualquier consideración, la familia y lo que era su relación con el país, con el idioma, con la idiosincrasia”, explicó.
Rojas agregó que encontró en la literatura una herramienta esencial para aportar una visión esperanzadora sobre la difícil realidad de un país en donde la gran mayoría desea la paz pero pocos actúan para alcanzarla.
“Incluso, a nivel de pensamiento, es fundamental que la gente piense que la paz es posible, entendida como ausencia de conflicto, ya es una cosa enorme, por lo menos que todos los días no tengamos este número de muertos del Ejército, de la guerrilla, de bandas criminales”, dijo.
La ex secuestrada junto a Betancourt, siendo su jefa de debate y fórmula vicepresidencial, reiteró que perdona a sus captores y que trata de no mirar atrás, sino de encontrar maneras de transformar a su país.
“Yo amo mi país. Desde niña me enseñaron a quererlo, y me gustaría que mi niño también aprenda a amarlo; y eso se logra viviendo, compartiendo, tratando de entender las cosas buenas y las no tan buenas que hay”, precisó.
Sin embargo, Rojas señala que para que haya un cambio real, es necesario un sistema de justicia que funcione y un arrepentimiento real por parte de los actores armados, que permita una reconciliación.
“Los actores armados tienen que hacer un acto de contrición, reconocer en algún momento que han hecho un daño; sin ese reconocimiento es muy difícil evitar que se repita, por eso uno de los bastiones de la democracia es tener un buen sistema de justicia”, aseveró.
En cuanto a la lucha del actual gobierno de Juan Manuel Santos, de derecha, contra la guerrilla de las FARC, la colombiana manifestó su preocupación por la intensificación de operativos militares en donde han perdido la vida decenas de oficiales.
“En el fondo uno no sabe que está pasando, hay unos enfrentamientos armados, una respuesta de las FARC que a mí me parece absurda por decir lo menos; me parece que han muerto demasiados soldados y policías en los últimos tres o cuatro meses; me duele profundamente por ellos, por sus familias”, dijo.
Para Rojas, es a través del diálogo transparente y comprometido, con mecanismos diplomáticos, el apoyo de la comunidad internacional, que se puede avanzar hacia un escenario pacífico en Colombia.
Así mismo, resaltó el papel de la mujer colombiana que representa más del 50 por ciento de la población, y que para ella es un factor de desarrollo importante.
“Lo comparo con otra situación de la mujer en Latinoamérica, y me parece que aquí la mujer ha alcanzado muchos espacios, en muchas circunstancias, porque la misma realidad nos ha forzado a hacerlo, de ir generando otros sistemas de producción que nos permitan pues hacer las actividades sostenibles”, agregó.
Entre los proyectos de la colombiana se encuentra la publicación de un libro que trata temas sobre la mujer y su participación activa en la Fundación País Libre, que apoya a las familias de cientos de secuestrados civiles que permanecen en manos de grupos guerrilleros.
“Estamos preocupados por la liberación de las personas que todavía están secuestradas, sobre todo desde el punto de vista civil, porque hubo mucha preocupación por los políticos y militares, pero todavía hay como 400 personas; no debemos dejar que el tema se muera”, señaló.
Rojas dijo que en cautiverio aprendió a valorar la fuerza del pensamiento que, señaló, fue lo que la hizo sobrevivir a una de las experiencias mas dramáticas que puede afrontar un ser humano, la pérdida de su libertad.
“El escenario que me tocó vivir cuando me secuestran es que me quitan todo, hasta el reloj; lo único que yo tenía era mi capacidad de respuesta, eso es en parte la libertad; hasta cierto punto yo seguí siendo libre en mi manera de pensar, no me dejé acoquinar por la situación”, recordó.
Por último, la colombiana celebró el poder compartir el Día Internacional de las Madres junto a su hijo Emmanuel, de quien -dijo- es su motor inspirador, a la vez que envió un saludo a todas las mujeres del mundo.
“Este es un día de los pocos universales que hay; desde Bogotá enviándoles un abrazo fraterno; ojalá todas las mujeres nos sigamos haciendo sentir con nuestro amor, con esa sutileza y feminidad que a veces logra derrumbar murallas y construir un futuro mejor”, concluyó.
Clara Rojas fue postulada en 2008 al Premio Príncipe de Asturias de la Cordialidad y la Concordia.
Aspiró al Senado representando al Partido Liberal en 2010, y continuamente es invitada para dar conferencias sobre temas como el papel de la mujer en el mundo actual y la resiliencia.