Shigeru Miyamoto es el principal artífice de la revolución del videojuego didáctico, formativo y constructivo; es el creador de las zagas de videojuegos Mario Bros y Zelda.
Sus creaciones tienen además la peculiaridad de que excluyen la violencia y sus innovaciones en programas y formatos ayudan a ejercitar la mente en sus múltiples facetas, lo que vuelve muy valiosos sus videojuegos desde un punto de vista educativo.
Ahora Shigeru Miyamoto es también el ganador del premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades.
Cuando le comunicaron el reconocimiento su expresión fue “Me siento muy honrado al conocer la noticia de que he sido elegido para recibir el Premio Príncipe de Asturias. La labor de crear videojuegos es, en gran medida, un trabajo en equipo y por este motivo me siento enormemente agradecido por haber sido elegido para recibir este ilustre Premio. Como consecuencia, me gustaría recibir este galardón en representación de mis amigos y compañeros, con los que he creado videojuegos a lo largo de mi carrera.
“En el futuro, continuaré esforzándome para que los videojuegos sean capaces de ofrecer de manera continuada diversión y alegría a personas de todas las generaciones y en todo el mundo”, añadió
Esto último es porque Miyamoto no solo es el padre del videojuego moderno, sino que ha conseguido, con su gran imaginación, crear sueños virtuales para que millones de personas de todas las edades interactúen, generando nuevas formas de comunicación y de relación, capaces de traspasar fronteras ideológicas, étnicas y geográficas.
Shigeru Miyamoto nació en 1952 en Kyoto, Japón, graduado en Arte y Diseño Industrial por la Universidad de Kanazawa (Japón), es actualmente director administrativo general del Área de Entretenimiento, Análisis y Desarrollo de Nintendo Co Ltd., compañía de la que forma parte desde 1977, y máximo responsable del Área Recreativa y de Desarrollo de Producto.
Su creación insignia, Mario Bros, lleva 275 millones de unidades vendidas, con lo cual es la saga de juego más comercializada de la historia y la crítica ha definido a la saga The Legend of Zelda como “el mejor videojuego creado hasta ahora”.
En 1996 marcó otro hito con Super Mario 64, el primer juego realizado íntegramente en 3D que fue pionero al dotar de movimiento a personajes y cámaras de forma independiente.
Shigeru Miyamoto es también el creador de la primera consola de doble pantalla, siendo una de ellas táctil, Nintendo DS, de la que se han vendido en Europa tres millones y medio de unidades en un año. Esta consola ha sustituido, en 2012, a la tradicional audioguía del Museo del Louvre.
Miyamoto tiene entre sus creaciones programas como Brain Training, diseñado, como su nombre indica, para ejercitar la mente; Wii Music, juego de composición musical que se ha convertido en la herramienta más popular de enseñanza de esta materia que ya utilizan escuelas de todo el mundo, y Wii Fit, una tabla de ejercicios que por primera vez se controla con el movimiento del cuerpo y de la que se han vendido más de treinta millones de unidades.
Gracias a estas creaciones ha logrado hacer del videojuego una revolución social y ha conseguido popularizarlo entre un grupo de población que no había accedido aún a este tipo de entretenimiento, haciendo a su vez que sea un medio capaz de unir a las personas sin distinción de sexo, edad ni condición social o cultural.
Shigeru Miyamoto plantea los juegos como un elemento de integración familiar y social, una experiencia que pueda ser compartida por todos, que ayude a expresar emociones y consiga conmover al jugador.
Miembro del Salón de la Fama de la Academia de las Artes y las Ciencias Interactivas (1998) y Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia (2006), Shigeru Miyamoto ha obtenido, además, importantes distinciones entre las que destacan su nombramiento como el personaje más influyente del mundo en 2008 por la revista Time (EE.UU.) y el Premio GAME otorgado por la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (Reino Unido, 2010), de la que también fue nombrado miembro.