El equinoccio de marzo ocurrirá éste 20 de marzo a las 4:30 horas de la madrugada, en el tiempo universal coordinado (en la hora de Mexico será el 19 de marzo a las 22:30), iniciando así el «Equinoccio de Primavera» para el hemisferio norte del planeta (al terminar el invierno y comenzar la primavera) y el «Equinoccio de Otoño» para la parte sur (que marca el paso del verano al otoño), por lo cual los días comenzarán a tener más luz
El equinoccio es un fenómeno que ocurre dos veces al año. El primero entre el 19 y el 21 de marzo y el segundo entre el 21 y 23, épocas en que los dos polos de la Tierra se encuentran a igual distancia del Sol, cayendo la luz solar por igual en ambos hemisferios.
Cuando se produce el equinoccio el día y la noche tienen la misma duración, es decir 12 horas cada uno y ese es precisamente el significado de la palabra: equi “igual” y nox “noche”, “noche igual al día”.
El término de primavera proviene de las palabras «prime» y «vera» que significan «el buen tiempo». Esto en referencia a las condiciones agradables que trae consigo esta época del año. Por ello varias celebraciones en Iberoamérica coinciden con el inicio de esta estación, pues es símbolo de juventud, amor, vida, sol, aire y todo lo colorido.
Al inicio de la primavera los días del año son más largos, puesto que es el tiempo en que el Sol está por encima del horizonte y aumenta casi tres minutos cada día.
La primavera, es considerada como la estación más agradable, ya que se asocia a la fertilidad, la reproducción de las especies, al descanso y las vacaciones.
A través de los siglos, muchas de las culturas antiguas desarrollaron observaciones, calendarios y cultos a partir de esta fecha, por ser el Sol el protagonista del fenómeno, pues se le reconocía como uno de los elementos más importantes para el desarrollo y sustento de al vida en la tierra.
Este equilibrio es el que propicia que se hagan rituales diversos en torno a los equinoccios, a los cuales se les conoce como “experiencias espirituales”, pues tratan de “reconectarse” con la Madre Tierra y su energía natural a través de meditación, baños en temascal y visitas a santuarios naturales, entre otros.
La primavera termina con el solsticio de verano, alrededor del 21 de junio en el hemisferio norte y del 21 de diciembre en el hemisferio sur. En este día la Tierra alcanza su posición más alejada en su órbita alrededor del sol, con ello se produce la mayor diferencia del año entre la duración del día y la noche.
Los movimientos astronómicos
Por lo que se refiere a los planetas, el cielo matutino del comienzo de la primavera estará dominado por Venus, Marte y Saturno.
A mitad de la estación, Marte y Saturno serán visibles toda la noche y terminarán la primavera siendo visibles en el cielo vespertino junto a Júpiter, que durante toda la estación será visible al atardecer.
El día 23 de marzo habrá un eclipse penumbral de Luna, que será visible en Asia, Australia, el Pacífico y América.
Además, el 9 de mayo se producirá un tránsito de Mercurio por delante del Sol, y el día 6 de junio Venus será ocultado por el Sol.