México, (EFE).- Por fin, la posibilidad de que el Penacho de Moctezuma, que está ahora en Austria, llegue a México, existe.
Pero vendía sólo en calidad de préstamo; de visita, pues.
México podría recibir próximamente el controvertido Penacho de Moctezuma, que está en Austria desde el siglo XVI, si el Senado mexicano y el Legislativo austríaco aprueban un protocolo que modifica un convenio cultural suscrito por ambas naciones en 1974, dijeron a Efe fuentes de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
En el caso del Penacho, según cuenta el cronista Bernal Díaz del Castillo en su "Historia verdadera de la conquista de la Nueva España", fue obsequiado por el propio Moctezuma al conquistador Hernán Cortés, quien a su vez se lo regaló a Carlos I de España.
Se cree que años después pasó a ser propiedad de la Casa Real de Austria cuando el barco en el que viajaba el penacho fue atacado en Jamaica por corsarios franceses y medio siglo después fueron adquiridas a un ladrón italiano por el archiduque de Austria Fernando II del Tirol.
El gobierno de México reclamó formalmente en 1991 a las autoridades austríacas la devolución del penacho, que ha permanecido casi quinientos años en Europa, sin obtener respuesta.
Desde entonces investigadores, indigenistas e incluso descendientes directos de Moctezuma han luchado por su regreso con numerosas manifestaciones realizadas en Austria y Alemania.
Austria nunca ha cedido la pieza a México alegando su extremada fragilidad, pero también por temor a que jamás fuera devuelta.
Un portavoz de la SRE confirmó que tras dos años de negociaciones ambos Gobiernos «firmaron un Protocolo que modifica el Convenio Cultural de 1974 con ese país y que, en caso de ser aprobado por el Senado mexicano y el Parlamento austríaco, permitirá el viaje temporal de la pieza a nuestro país».
México sostiene que «los poderes Ejecutivos (de ambos países) han hecho ya la labor básica y ésta se podrá concluir una vez que los instrumentos sean ratificados conforme a las Constituciones respectivas» por los Legislativos de cada país para que la llegada del penacho a México «sea viable».
En Viena, fuentes del ministerio de Cultura y Educación de Austria señalaron que la aprobación en el Legislativo de ese país europeo podría ser «cuestión de meses».
En el caso de México es al Senado al que corresponde la suscripción de tratados internacionales y todo lo relacionado con los lazos exteriores y, por tanto, el préstamo del penacho de Moctezuma (1466-1520).
El Penacho de Moctezuma, emperador azteca a la llegada de los españoles a México en 1519, es un tocado de unas 400 plumas de quetzal engarzadas en oro y piedras preciosas que constituye un importante símbolo nacional para México.
El portavoz de la SRE detalló que los Gobiernos de México y Austria «han trabajado durante al menos un par de años en la búsqueda de una fórmula jurídica para que el Penacho pueda ser exhibido en México temporalmente y regrese después a Austria, al Museo de Etnografía al cual pertenece» y donde ha estado desde 1929.
La propuesta que ahora pasará a los poderes legislativos de los dos países «establece la posibilidad de suscribir un acuerdo marco» que detalle «los mecanismos para realizar intercambios temporales de piezas pertenecientes a los patrimonios culturales de ambas naciones».
La clave del pacto es el acuerdo marco que establecerá a detalle «los principios de respeto a la propiedad y garantías internacionales» debidas relacionadas con el préstamo.
Además, especificará «las condiciones técnicas y científicas para el transporte, resguardo, exhibición y retorno de las piezas prestadas en intercambio».
Para la SRE, el pacto alcanzado es un «novedoso concepto jurídico» que se espera sea emulado por otros países que no pueden exhibir objetos pertenecientes a sus culturas pasadas por el temor de los museos propietarios de que nunca fueran devueltas».
México, que lleva décadas reclamando la pieza, ha prometido la custodia óptima del penacho del «tlatoani» (gobernante) mexica y su devolución si el préstamo se produce.
Mientras tanto, un portavoz del ministerio de Cultura y Educación de Austria, refirió que el objetivo del acuerdo es «crear seguridades jurídicas a nivel internacional para el caso de préstamos temporales de bienes culturales», dijo el vocero.
El tratado, negociado entre los respectivos Ministerios de Cultura y Cancillerías de ambos países, no toca en ningún caso la cuestión de quién es el propietario del objeto cultural prestado, agregó el funcionario austríaco.
Para poder entrar en vigor, los Parlamentos de ambos países deberán aprobarlo, lo que en el caso austríaco podría suceder «en cuestión de meses», aclaró el portavoz. El actual acuerdo sobre el préstamo de bienes culturales entre Austria y México data de 1974 y no contiene procedimientos jurídicos en el caso de que una parte no devuelva un bien prestado.
El portavoz destacó que un eventual envío del Penacho a México estaría sujeto a un peritaje previo que certifique la posibilidad de transportar el artefacto «ida y vuelta» a Viena, donde se encuentra desde 1929 en el Museo de Etnología.
En ningún caso, el estado austríaco accederá¡ a una cesión permanente del Penacho a México, destacó la fuente ministerial, tras agregar que de acuerdo a sus informaciones, el Gobierno mexicano todavía no ha aprobado este acuerdo.