El radiotelescopio Australian Square Kilometre Array Pathfinder (Askap), el más poderoso y grande del mundo, fue inaugurado este viernes en una remota zona desértica de Australia, con el objetivo de investigar el origen de las estrellas, quásares y púlsares, y hacer un censo de todas las galaxias.
Askap, valorado en más de 1.500 millones de euros, dispondrá también de antenas e instalaciones en Nueva Zelanda y Sudáfrica. El ministro australiano de Ciencia, Chris Evans, dijo en el acto inaugural que este aparato será «el más poderoso del mundo y su capacidad superará con creces las actuales», según la cadena de televisión ABC.
La primera parte del proyecto iniciará en el 2020, pero aún en sus condiciones actuales comenzará a enviar ya datos al observatorio, en la cual se prevee que se maneje un equivalente de 124 millones de discos Blu-Ray, apuntó la misma fuente.
El telescopio fue puesto en el desierto de Australia Occidental para que las ondas de las ciudades no le causen interferencia; susinstalaciones ocupan 126 kilómetros cuadrados en los que se incluyen el observatorio Radioastronómico de Murchinson y 36 antenas SKA (Square Kilometre Array), de 12 metros de diámetro cada una.