Un proyecto de investigación de la UE crea uno de los sistemas más sofisticados del mundo para el modelado de enfermedades ya en uso en la prevención de la propagación del virus del Ébola.
El modelo de predicción, diseñado en la UE, indica que el número de afectados por Ébola podría alcanzar entre 14 000 y 22 000 personas a finales de noviembre de 2014 en África occidental (número de casos registrados). Este modelo matemático, denominado «Modelo de Movilidad Epidémica Global» ((Global Epidemic and Mobility Model), GLEaM) es uno de los más detallados y exhaustivos del mundo y ha sido desarrollado en el proyecto de investigación EPIWORK , financiado con fondos europeos y finalizado en 2013.
GLEaM genera simulaciones realistas de la propagación mundial de enfermedades infecciosas mediante la combinación de datos demográficos y de movilidad de personas, empleando complejos modelos estocásticos de transmisión de enfermedades. Utilizando fuentes de datos nunca antes empleadas, como el tráfico diario de pasajeros aéreos, censos, ingresos hospitalarios y servicios médicos, asistencias funerarias e incluso información facilitada desde teléfonos móviles, GLEaM es capaz de generar pronósticos precisos relacionados con la prevención sanitaria.
Este producto, resultado de la estrategia de excelencia en investigación de la UE, se encuentra actualmente a disposición de laboratorios de todo el mundo para ayudar a predecir la propagación de enfermedades globales como el Ébola.
El uso de GLEaM contra la enfermedad del Ébola
El profesor Alessandro Vespignani, en la actualidad director del Laboratorio para el Modelzado de Sistemas Biológicos y Sociotécnicos (MOBS LAB) de la Northeastern University de Boston, Estados Unidos, fue el coordinador de EPIWORK. «Empezamos a utilizar el modelo para el Ébola en julio de este año, cuando la enfermedad empezó a registrar un crecimiento exponencial en África occidental. También estamos analizando la posibilidad de que el Ébola se propague por todo el mundo. En este caso, hasta ahora las predicciones de los casos registrados han sido exactas, quedando los datos registrados dentro del rango de probabilidad calculado por el modelo», asegura el profesor Vespignani.
Este modelo se desarrolló durante el proyecto EPIWORK, empleando datos epidemiológicos recogidos durante el brote de gripe H1N1 de 2009, coloquialmente conocida como «gripe porcina», y poniendo dichos datos a disposición de la comunidad científica europea.
Daniela Paolotti , epidemióloga del Instituto para el Intercambio Científico (Institute for Scientific Interchange, ISI), fundación italiana que coordinó EPIWORK, añade: «El foco de GLEaM en 2009 fue la pandemia de gripe H1N1, aunque la intención inicial era poder aplicarlo a otras enfermedades infecciosas. La idea era construir un modelo que pudiera utilizarse para nuevas enfermedades emergentes y, gracias a ello, se ha podido adaptar también al Ébola».
Estas simulaciones ayudan a los responsables políticos a visualizar la posible propagación del brote, y de manera consecuente, a determinar las medidas de salud pública prioritarias para contenerlo.
Ciencia participativa a través de la web y una «app»
Durante el proyecto EPIWORK, los investigadores también desarrollaron « Influenzanet », un sistema para registrar la actividad de enfermedades con comportamiento similar a la gripe (influenza-like-illness, ILI). Este sistema se basa en la denominada «ciencia ciudadana», pues obtiene los datos directamente de personas que cumplimentan un formulario de solicitud en línea que incluye varias preguntas de carácter médico, geográfico y sobre hábitos.
Actualmente, Influenzanet cuenta con alrededor de veinte mil voluntarios que cooperan en comunidades locales de diez países de la UE, proporcionando información adicional a epidemiólogos y científicos relacionados con la salud pública. Anteriormente, estos profesionales sólo podían confiar en las informaciones recogidas por los médicos de atención primaria como sistema de alarma de la presencia de enfermedades infecciosas. Así, Influenzanet crea un sistema de seguimiento complementario rápido y flexible que, si bien no sustituye al sistema de alarma tradicional, sí permite la comparación directa de ILI entre distintos países.
En algunos de los países participantes en Influenzanet, los datos recogidos se publican semanalmente en las páginas web de vigilancia de la administración como anexo a los datos oficiales. Además, durante el proyecto EPIWORK los socios desarrollaron un contacto estrecho con la administración sanitaria de los respectivos países, con el objetivo de alertarlas en caso de que los datos recogidos a través de Influenzanet merezcan una atención urgente.
Influenzanet también ha desarrollado una «app» informativa para dispositivos móviles disponible para el público en los portales de algunos países participantes (ver https://www.influweb.it/app/), iTunes, Facebook y Twitter. «En países como Italia, donde se accede a Internet principalmente a través de smartphones, la participación ha aumentado enormemente gracias a la app móvil», comenta Daniela Paolotti.
El proyecto EPIWORK comenzó el 1 de febrero de 2009 y finalizó el 31 de julio de 2013. En el mismo participaron doce equipos de ocho países, recibiendo 4,85 millones de euros del Séptimo Programa Marco.