El Congreso del Estado exhibe, en una de sus galerías, la muestra pictórica “Una Línea de Luz” del pintor Luis Liviin que consta de 14 obras en desnudos: siete femeninos y siete masculinos, cuyo mensaje es la autoaceptación del ser humano y la confianza en sí mismo.
Las pinturas –indica el autor- no tienen rostros para que la gente pueda reflejarse en ellas o evocar el recuerdo de alguien en particular: “es muy marcado el rechazo a mostrar el cuerpo y la naturaleza humana y por eso las obras son un grito de lo natural”.
El artista reveló que su obra inició con desnudos femeninos en los que buscaba exaltar la figura mexicana: las curvas y los pliegues, incluso las estrías que a muchas mujeres no les agradan, pero que son la huella, la cicatriz de la bella experiencia de haber dado a luz un hijo.
Son marcas de vida que deben mostrarse con orgullo, advierte, aunque para él, lo más sensual de una mujer es su seguridad y aceptación.
El arquitecto explicó que la técnica utilizada en su obra es a partir de experiencias personales en la construcción: “Empecé a experimentar con la pintura y nuevos materiales; en este caso se trata de un fieltro asfáltico combinado con pintura, más espátulas y pasión para descubrir figuras a través de manchas”.
El corte del listón inaugural estuvo a cargo del presidente municipal de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez; los artistas plásticos Manuel Fematt Rodríguez y el autor, entre otros.