Incluir el análisis de género es clave para que la investigación científica no sea “ciega” o “miope”, ya que es muy importante incluir las diferencias entre hombres y mujeres como son las biológicas, sociales y culturales, explicó Ana Puy Rodríguez, representante de la Unidad de Mujeres y Ciencia del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad (MINECO) de España.
“No tenemos las mismas necesidades a la hora de utilizar ciertas tecnológicas que se supone están hechas para mejorar la calidad de vida de las personas, por ejemplo, hasta ahora se ha pensado más en los hombres cuando se hace el diseño de los autos, por ejemplo, las mujeres ¿dónde ponemos el bolso dentro de un auto? también es necesario adaptar los cinturones de seguridad para las mujeres embarazadas y prevenir daños, pero ya llegaron las ingenieras y le han dado un análisis a las innovaciones tecnológicas con perspectiva de género.
“Eso es ponerse las gafas de género para reconocer que en el mundo somos mujeres y hombres, y que en algunas cosas tenemos las mismas necesidades pero en otras no. En la biología ha habido cambios mucho más lentos pero el género cambia más, por eso, hay que estar pendientes de aquello que se está desarrollando”, dijo la doctora en psicología social.
La perspectiva de género en las universidades
En la Unión Europea hay universidades que realizan un trabajo fuerte para visibilizar y dinamizar la perspectiva de género, por ejemplo, en España, las universidades tienen planes de igualdad, donde uno de los ejes, es el análisis de género en la investigación. Parte de la responsabilidad social de los centros educativos es la formación de alumnos que integren de manera natural a su formación la perspectiva de género, para que posteriormente tenga un efecto multiplicador.
“Desde la Ley de Igualdad de 2007 y la Ley de Universidades, se tienen que tener unidades de igualdad, y todas las organizaciones con más de 250 personas tienen que contar con un plan de igualdad, además, con la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación, desde el 2011, se requiere que todas las investigaciones incorporen transversalmente el género”, explicó la profesora de psicología social de la Universidad de La Laguna (ULL), en Tenerife, España.
Ante la confusión que pudiera surgir con los términos sexo y género, la investigadora en los campos de desigualdad de género y políticas de igualdad de género, detalló que el sexo se refiere a las características que tiene el individuo, por ejemplo, sistema reproductivo, hormonal, peso y estatura promedio, mientras que el género son los factores sociales y culturales que tienen que ver con las tareas que se consideran apropiadas para mujeres y hombres, de acuerdo a los estereotipos.
“Si los roles, como el cuidado de las personas se sigue pensando que son más apropiados para las mujeres y que la ambición y el poder son más de los hombres, todo eso es género, la manera en cómo nos vestimos, lo que se nos permite hacer, eso es género, es cultura y eso es cambiante.
“Pesa mucho el género porque son cosas que tenemos interiorizadas, a veces inconscientemente, por eso, los grupos de investigación se tienen que formar con análisis de género para que la investigación no venga sesgada”, explicó la integrante del Instituto Universitario de Estudios de Mujeres de la ULL.
Estudios realizados en Suecia, arrojaron que la limpieza de la nieve en las calles y autopistas estaba enfocada para los automóviles, pero no así en las aceras, transitadas generalmente por las mujeres que llevan a sus hijos a las escuelas, “pero cuando se incorporó la perspectiva de género se tuvo una nueva mirada del mundo y se ha reconocido y tomado en cuenta las áreas de las mujeres, que tienen un peso muy importante para la sociedad”, indicó la coautora del libro Hombres y mujeres en la Universidad de La Laguna.
La doctora Ana Puy Rodríguez fue entrevista al término de la conferencia “Integración de la dimensión de género en contenidos y programas de investigación” que dictó ayer dentro del Taller Género en Ciencia e Innovación que durante dos días organizó el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y el Instrumento de Intercambio de Información sobre Asistencia Técnica de la Unión Europea (TAIEX, por sus siglas en inglés).