Ingrid Daubechies es una matemática y física belga, que ha realizado importantes aportaciones en el campo de las ondículas, o wavelets, que son una herramienta que permite descomponer un objeto matemático, pero también, por ejemplo, una imagen, en componentes más simples. También fue la primera mujer matemática en presidir la Unión Matemática Internacional, desde 2011. Como mujer y matemática, igualmente ha sido la primera catedrática de la Universidad de Princeton, y la primera mujer en recibir el Premio de la Academia Nacional de Ciencias americana
Daubechies, también se deja llevar por el interés que le suscitan los problemas en otras áreas, como el arte, y colabora en esa línea de investigación con historiadores del arte.
Nació en Houthalen, Bélgica, el 17 de agosto de 1954; estudió física en la Vrije Universiteit Brussel (el Universidad de Bruselas en lengua flamenca), en donde también se doctoró en física teórica en 1980, y en la que realizó investigación desde 1975, cuando obtuvo su titulo de licenciatura, y se convirtió en Asistente de Investigación en el Departamento de Física Teórica en la Universidad Libre de Bruselas, hasta 1987, año en que se casa con el también matemático Robert Calderbank. El matrimonio se traslada a Estados Unidos, donde Daubechies llega a los Laboratorios Bell de Nueva Jersey y trabaja varias universidades estadounidenses.
Fue allí cuando comenzó su interés por las llamadas waveletes (u ondículas en español). El matemático francés Joseph Fourier pensó que todas las funciones se pueden descomponer en sumas de senos y cosenos –de donde deriva la descomposición de Fourier que bien conocen los físicos e ingenieros-, las ondículas son una generalización de este concepto, que permite mucha mayor versatilidad.
En 1993 Daubechies se convierte en profesora de matemática computacional en la Universidad de Princeton, hasta 2011, año en que se traslada a la Universidad Duke donde es catedrática de matemáticas.
Ingrid Daubechies ha trabajado en el campo de las ondículas, herramientas que derivaron en un nuevo enfoque científico de la compresión de datos, que permiten el análisis de señales para entregar información temporal y frecuencial de manera casi simultánea, y que por lo mismo han tenido un gran impacto en multitud de tecnologías, que incluyen la transmisión eficiente de audio y vídeo, y la imagen médica”.
En el ámbito práctico, esta descomposición hace posible transmitir imágenes con mucha carga de información sin perder calidad.
En 1988, Daubechies propuso la ondícula ortogonal con soporte compacto (conocida como ondícula Daubechies), y en 1992 la ondícula biortogonal, también conocida como ondícula CDF (Cohen-Daubechies-Feauveau), empleada para el formato de comprensión de imágenes JPEG 2000.
Estas herramientas matemáticas permiten el avance e investigación tanto en matemática teórica como aplicada, pues sirve en la demostración tanto de teoremas como en el desarrollo de las telecomunicaciones, tanto en audio como vídeo, y hasta el ámbito biosanitario, con transmisión de datos de imágenes sanitarias.
Daabechies ha recibido numerosos distinciones, entre ellas que en 2012, el rey Alberto II de Bélgica la concedió el título de Baronesa.
Igualmente ha recibido múltiples premios, entre estos destacan el Premio Nemmers en Matemáticas de 2012 y el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Ciencias Básicas 2012 junto a David Mumford.
De hecho, ella recibió su primer gran premio en 1984 cuando fue galardonado con el Premio Louis Empain de Física. Este prestigioso premio es otorgado una vez cada cinco años a un científico de Bélgica sobre la base del trabajo realizado hasta la edad de 29.
Ingrid Daubechies es miembro de numerosas instituciones. En 1993 fue admitida en la Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias, en 1998 en la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos y en 2012 en la Sociedad Estadounidense de Matemática. Además, ha sido invitada a participar en numerosas ocasiones en el Congreso Internacional de Matemáticas.