Investigadores mexicanos buscan desarrollar un programa de computación que ayudará a combatir la piratería digital, informó hoy el Centro de Investigación y Tecnología Avanzada (Cinvestav).

     El investigador de la Unidad Tamaulipas del Cinvestav, José Juan García, explicó que así como cada persona posee un ADN que almacena su información genética, los productos digitales (imagen, audio, video o textos), también.

     La información confidencial que guarda, a través de marcas de agua digital invisibles, son datos del autor y nombre del comprador, lo cual permite rastrear al responsable si se hace una distribución o uso ilegal del producto, indico García, según un comunicado difundido por el Cinvestav, centro científico del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la segunda institución de educación superior pública del país después de la UNAM.

     Esta aplicación garantiza la protección de derechos de autor, el control de distribución de copias, la protección contra copias ilegales, autenticación de datos y comunicaciones secretas.

     Con motivo del Día Mundial contra la Falsificación, que se celabró el 8 de junio, García destacó que este programa es útil en la protección de información sensible en expedientes médicos, donde se pueden insertar los datos referentes al dictamen que hace el doctor respecto del paciente, sin que sean vistos por terceros.

     El objetivo es crear un «software» (programa) y un «hardware» (dispositivo) atractivo comercialmente que acelere el proceso de detección de marcas de agua digitales, ya que en la actualidad marcar 30.000 imágenes digitales toma de dos a tres días, sin embargo con un circuito digital puede llevar sólo tres horas, comentó García.

     Para la industria de la música es muy útil, ya que cuando una persona adquiera una melodía en internet ésta llevará insertada en su marca de agua el nombre del comprador, por lo tanto si es utlizada de manera ilegal se puede rastrear el nombre de quien lo hizo, indicó el investigador.

     El especialista en electrónica dijo que se trata de un campo en crecimiento, por lo cual aún se tiene incredulidad ante el poder de la técnica, ya que la inserción y detección de las marcas de agua están basadas en leyes probabilísticas y pueden fallar, lo cual ha limitado a los gobiernos a legislar el uso de estas técnicas.

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