La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que las ciudades deben disponer de entre diez y 15 metros cuadrados de área verde por habitante, pero en el Distrito Federal existen cerca de 5.3 metros cuadrados por persona. Ante esta situación, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se incubó la empresa Generación Verde, creadora de jardines verticales y azoteas verdes con el fin de adaptar vegetación a las ciudades.
El ingeniero Ulises Martínez Gilbón, director general de Generación Verde, detalló que la idea nació en 2010. “Cuando yo quería hacer algo por la ecología y la sociedad, entonces opté por la naturación urbana, me llamó la atención porque era algo diferente, innovador y necesario en las ciudades que ya no tienen espacios verdes”.
La empresa universitaria ofrece una solución de aprovechamiento del espacio tanto en casas, edificios, restaurantes y oficinas a través del diseño y creación de jardines verticales y azoteas verdes, generando diversos beneficios como “mejorar el ambiente con la presencia de plantas, ya que estas filtran contaminantes, producen oxígeno y absorben el CO2. Otro aprovechamiento es el ahorro de energía y de agua, ya que se utiliza riego automático. Además de tener un muro verde, que da vida y embellece un espacio”, enfatizó.
En el caso de una azotea verde, se garantiza la regulación de temperatura interna y externa del inmueble, purifica el aire, mejora la acústica del lugar aislando el ruido y retiene el polvo del aire; además baja el consumo energético obtenido de sistemas de clima artificial.
Para que esta empresa mexicana desarrolle un muro verde bastan las medidas y una fotografía del espacio, el personal hace una precotización y si el cliente acepta, se rectifican las medidas en el lugar y se inicia con el diseño al que se puede agregar más de 50 variedades de plantas mediante agricultura hidropónica. Una vez colocado el espacio verde, añade a la instalación manuales y servicios de mantenimiento y garantía de seis meses.
Martínez Gilbón, también fundador de la compañía, detalla que quiso hacer algo fuera de lo cotidiano, diferente a la jardinería tradicional. “Hice algunos prototipos y me acerqué al Sistema de Incubadoras de Empresas InnovaUNAM, ahí me ayudaron con asesorías para crear el plan de negocios, fue un gran apoyo”.
Una de las dificultades que enfrentó el empresario fue no conocer el mercado de construcción en México, indispensable para estimar ventas; sin embargo, la empresa Generación Verde se mantuvo en pie por el concepto innovador y por ser una compañía familiar, lo motivó y continuó.
“Para desarrollar las ideas novedosas que surgen dentro de la universidad y lograr que encuentren salida al mercado, se necesitan vinculaciones que la misma UNAM puede proporcionar a través de sus alumnos, académicos y exalumnos. Además de una mentalidad de emprendimiento y consciencia de que las cosas pueden no salir como lo planeamos, debemos intentar y no enfocarse en un resultado inmediato”, agregó Ulises Martínez Gilbón, también académico de la máxima casa de estudios.