La falta de prevención y un estilo de vida sedentario son algunas de las razones que han aumentado la prevalencia de la diabetes, hipertensión arterial y obesidad. A futuro los pacientes con estos padecimientos desarrollarán problemas de riñón y se sumarán a los 9.5 millones de mexicanos que viven con enfermedad renal crónica, de acuerdo con un estudio realizado por la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El análisis efectuado en 2013 indica que anualmente se diagnostican 130 mil nuevos pacientes con problemas renales, como consecuencia de malos cuidados y tratamientos de las enfermedades crónico degenerativas.
En relación a ello, José Ernesto López Almaraz, médico adscrito al departamento de Nefrología y Metabolismo Mineral del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” (INCMNSZ), comentó que es importante reconocer a la diabetes como la principal causa de la enfermedad renal crónica.
Asimismo, durante el Primer Congreso Nacional de Organizaciones de Pacientes Renales, impulsado por la Federación Mexicana de Enfermos y Trasplantados Renales (FEMETRE), López Almaraz agregó que el diabético no sólo debe cuidar su peso y el nivel de azúcar, sino verificar el correcto funcionamiento del riñón.
A fin de evitar llegar a un estado crónico, los pacientes deben hacerse una evaluación anual para saber cuál es la condición actual de los riñones. Además, un punto clave es apoyarse en un especialista, como un nutriólogo que le dé la dieta adecuada y en los endocrinólogos que monitoreen el tratamiento actual.
Otra razón que dificulta el buen cuidado es la falta de apego a las consultas, ya que en México, las instituciones médicas agendan cada cuatro meses las citas y no de manera bimestral como indican los estándares internacionales.
El también integrante del consejo médico de FEMETRE exhortó a promover el auto cuidado y a hacer responsables a las personas por su salud. Esto como una estrategia que permita frenar la prevalencia de diabetes, obesidad y sobrepeso, en los jóvenes y niños, a fin de disminuir el número de pacientes.
“Debemos migrar de la imagen del médico que solamente receta medicamentos y el paciente los recibe, a un sistema donde la persona con la enfermedad interactúe más, y esté mejor informado sobre su tratamiento, debe interesarse por saber qué toma y para qué sirve. Es necesario eliminar la idea de que la relación con el paciente es vertical, debe ser unilateral a fin de abrir la comunicación”, dijo el doctor López Almaraz.
(Agencia ID)