El bombero de Mississippi que sufrió graves quemaduras y que cautivó al mundo cuando fue sometido con éxito al trasplante de rostro más completo jamás ejecutado, está avanzando bien un año después de su histórica cirugía, según su equipo médico del NYU Langone Medical Center (Centro Médico Langone de NYU). Entre sus muchos hitos, nunca ha tenido un incidente en el cual su organismo haya intentado rechazar el nuevo rostro, un logro inédito entre las personas que se han sometido al procedimiento.
Patrick Hardison, de 42 años, quien sufrió heridas mientras cumplía su deber en 2001, ha sido objeto de varios procedimientos de seguimiento desde su trasplante, principalmente para ajustarle los nuevos párpados y labios, y para retirarle el tubo de alimentación del abdomen y el tubo de respiración de la tráquea. Como resultado, él ha podido regresar a las actividades que ama pero en las cuales no había podido participar desde su accidente, como manejar un auto y nadar.
«La cirugía me ha devuelto verdaderamente la vida», afirma Hardison. «Hago mis actividades diarias como cualquier otra persona. Me ha permitido hacer cosas con mi familia que no había sido capaz de hacer. No puedo explicarle la sensación de libertad tan grande que siento con tan sólo llevar a mis hijos a la escuela en el auto. Hace poco mi familia fue de vacaciones a Disney World, y me bañé en la piscina con ella, algo que no había hecho en 15 años».
Hardison también agrega: «Ya no me miran fijamente, ni ningún niño asustado corre para alejarse de mí. Me parezco bastante a una persona normal. Ahora quiero ayudar a otras personas a solicitar este tipo de cirugía, en particular a mis colegas bomberos y a los miembros de las fuerzas armadas. Definitivamente hay esperanza».
Los hitos médicos en detalle
Eduardo D. Rodríguez, doctor en Medicina y doctor de Cirugía Dental, titular del Departamento de Cirugía Plástica Hansjörg Wyss de NYU Langone y el cirujano que encabezó el equipo de más de 100 profesionales médicos que ejecutó el trasplante de Hardison, señala tres hitos significativos en su recuperación: la ausencia de un episodio de rechazo; la función normal de los nuevos párpados de Hardison; y la ejecución y el logro del más completo trasplante de rostro clínico de tejido blando hasta la fecha.
«Nos asombra la recuperación de Pat, que ha superado todas nuestras expectativas», indica Rodríguez. «Lo más significativo es la ausencia de un episodio de rechazo. Creemos que ello tiene mucho que ver con el metódico enfoque que adoptamos en el proceso de selección para asegurar que el donante de Patrick fuera el candidato más favorable. Hacerlo también nos ha permitido reducir los niveles de ciertos medicamentos que Pat toma para evitar el rechazo».
Rodríguez también concluye que incluir estructura ósea facial selectiva además del mentón del donante aportó células madre de la médula ósea naturales que contribuyeron a que el rostro trasplantado progresara bien luego de la cirugía, y proporcionó el soporte posicional necesario para los tejidos blandos faciales.
El exitoso trasplante de los párpados y los mecanismos de parpadeo también ha sido particularmente importante, pues Hardison corría peligro de perder la vista y no había sido capaz de realizar las tareas diarias de manera independiente. Parpadear le permite al organismo hidratar y limpiar adecuadamente los ojos para prevenir las infecciones y mantener la visión.
Ahora que Hardison posee párpados plenamente funcionales, Rodríguez considera que este aspecto particular de la cirugía de Hardison representa una avance radical para el campo del trasplante de rostro. «Poder darle a Pat este grado de independencia es una razón fundamental por la cual asumimos esta cirugía», sostiene Rodríguez.
En fecha anterior del presente año, Rodríguez y su equipo publicaron una serie de artículos en la revista arbitrada Plastic and Reconstructive Surgery en los que detallaron muchos aspectos del caso, entre ellos la importancia de la conservación y mejora de los párpados en el trasplante de rostro. La serie de artículos también describe en detalles un enfoque metódico para los equipos de trasplante de rostro que valoran operar a pacientes con quemaduras de la nuca y el rostro completo que han provocado una desfiguración grave.
La extraordinaria recuperación de Hardison –y la ausencia de un episodio de rechazo– asimismo le ha posibilitado a su equipo médico proceder a retirarle el tubo de alimentación abdominal y el tubo de respiración de la tráquea en una fase mucho más temprana de su recuperación. Además de retirarle los tubos a Hardison, Rodríguez también le ha realizado revisiones a la frente, los ojos, los labios, el mentón y los oídos, ahora que la mayor parte de la inflamación se ha reducido.
«Pat ha cumplido con un rigor increíble su régimen posoperatorio, y ello nos ha permitido acelerarle el cronograma quirúrgico», observa Rodríguez. «Él está sumamente comprometido a hacer ejercicios a diario, a tomar los medicamentos y a ver a los médicos con regularidad. Debido a todo ello, está muy adelantado en lo que se refiere a alcanzar el nivel óptimo de recuperación y apariencia».
De cara al futuro
Luego de un año de recuperación, Hardison dice que se siente listo para conocer a los familiares del donante, David Rodebaugh, para agradecerles por la decisión de donar su rostro, al igual que donar otros órganos a otros candidatos a trasplante. Un encuentro con ellos está previsto para finales del otoño.
«En muchos trasplantes exitosos, existe un donante o una familia donante que posibilita estos regalos altruistas, en el momento más difícil de sus vidas», expresa Helen Irving, presidenta y CEO of LiveOnNY, la organización de recuperación de órganos del área metropolitana de la ciudad de Nueva York. «Estamos deseosos de coordinar el encuentro».
La Sra. Irving aprovecha para señalar que el estado de Nueva York estudia nuevas leyes para mejorar las oportunidades para la donación de órganos.
Desde el trasplante de rostro del año pasado, otras iniciativas han avanzado. Hasta la fecha, los trasplantes de rostro en Estados Unidos han sido financiados, al menos de manera parcial, con fondos para las investigaciones. El departamento de Defensa de Estados Unidos, en coordinación con los centros de trasplante, colabora con las empresas de seguro para ofrecer cobertura para el trasplante de rostro. Y aquí en Nueva York, el Gobierno del estado estudia nuevas leyes para mejorar las oportunidades para la donación de órganos.
Asimismo, el departamento de Defensa trabaja de cerca con Rodríguez y LiveOnNY para promover la concientización en torno a los trasplantes de rostro y la importancia crucial de donar órganos.
«Nos hemos adentrado en una nueva era en la cirugía de trasplantes», señala Rodríguez. «La labor que se realiza, no solamente en el trasplante de rostros sino también en áreas como el trasplante de manos, de úteros y de penes, está ampliando los límites de la medicina y la cirugía y abriendo nuevas posibilidades para restablecer la vida de personas como Patrick. Es una época muy emocionante».
NUEVA YORK, agosto de 2016 /PRNewswire-HISPANIC PR WIRE/ —