Un telescopio lanzado por la NASA el 11 de julio captó las imágenes de mayor resolución jamás tomadas, de millones de grados de la atmósfera del sol, denominada la corona.
La claridad de las imágenes podrá ayudar a los científicos a comprender mejor el comportamiento de la atmósfera solar y sus efectos sobre el ambiente espacial de la Tierra.
«Estas imágenes revolucionarias del sol ilustran los principales aspectos del Programa de Cohetes de la NASA «, dijo Barbara Giles, Director de la División de Heliofísica de la NASA en Washington, quien también ponderó que con estos resultados se podrá formar mejor a las próximas generaciones de investigadores, así como potencializar el desarrollo de nuevas tecnologías espaciales y avances científicos.
El cohete fue lanzado desde el área de lanzamiento de misiles White Sands en Nuevo México, llevando el sonar de alta resolución del cohete de la NASA Imager (Hi-C) del telescopio, el cual tomó 165 imágenes de excelente resolución durante sus breves 620 segundos de vuelo.
El telescopio se centra en una región de gran actividad del sol y tomó algunas imágenes que revelan la estructura dinámica de la atmósfera solar con gran detalle, las cuales fueron captadas en la longitud de onda ultravioleta extrema, la cual es una onda de energía más alta que la luz y por lo mismo óptima para ver la corona solar caliente.
«Tenemos un instrumento excepcional que se puso en marcha en el momento adecuado», dijo Jonathan Cirtain, heliofísico en jefe del Centro Marshall de Vuelo Espacial en Huntsville, Alabama. «Debido a la intensa actividad solar que vemos en este momento, hemos podido centrarnos en lo importante”.
El telescopio ha tomado a la fecha, una imagen más o menos cada 5 segundos. Su resolución es aproximadamente cinco veces más detallada que las obtenidas por la Atmospheric Imaging Assembly (AIA) instrumento colocado en el Solar Dynamics Observatory (SDO). A modo de comparación, la AIA puede ver las estructuras en la superficie del Sol con una claridad de aproximadamente 675 kilómetros y observar el Sol en 10 longitudes de onda de la luz.
Las imágenes de alta resolución han sido posibles debido a una serie de innovaciones ópticas en la matriz de la Hi-C.
El telescopio incluye algunos de los mejores espejos que se han hecho para el espacio. El aumento de la resolución de las imágenes captadas por Hi-C es similar a la diferencia de calidad de las imágenes que se veían en un televisor de tubo de rayos catódicos a los de un televisor de alta definición.
Desarrollado inicialmente en Marshall, la configuración final se dio con las aportaciones de los asociados del Observatorio Astrofísico Smithsoniano (SAO, por sus siglas en ingles) en Cambridge, Massachusetts, y con una nueva técnica de fabricación desarrollada en coordinación con los laboratorios o L-3Com/Tinsley de Richmond, California.
Los científicos e ingenieros de Marshall, SAO, y la Universidad de Alabama en Huntsville, han trabajado para completar la alineación de los espejos, el espacio para el mantenimiento óptico en el margen de unas pocas decenas de milésimas de pulgada.