Agresividad, curiosidad y sociabilidad son algunos rasgos de la personalidad que también se presentan los animales, y estas características pueden tener consecuencias a largo plazo en la reproducción y la supervivencia de las crías. Pero también influyen los factores ambientales, como en el caso de los jabalíes (Sus scrofa). La disponibilidad de comida afecta de una manera u otra a las diferentes personalidades.
Las crías de madres menos arriesgadas crecen en un entorno protegido con mayores posibilidades de supervivencia
El estudio, publicado recientemente en Animal Behaviour, determinó el comportamiento de 57 hembras de jabalí colocando en un recinto cerrado nueve objetos desconocidos por los animales: un balón de fútbol, una cesta y un animal de plástico, entre otros. Así los científicos de la Universidad de Medicina Veterinaria de Viena (Austria) pudieron precisar la personalidad de cada una de ellas al analizar sus reacciones y cómo interactuaban entre ellas en los vídeos grabados.
A continuación, los expertos reprodujeron diferentes situaciones en condiciones seminaturales con regímenes de alimentación variables. Es decir, hicieron que los animales se enfrentaran a mayor o menor disponibilidad de comida. De este modo, pudieron concretar por primera vez cómo afecta la personalidad de las madres influidas por la disponibilidad de bellotas y hayucos en la supervivencia y cuidado de las crías.
Los resultados demostraron que si hay suficiente alimento para todas, las jabalinas más tímidas son las que cuidan mejor de su descendencia, en comparación con las madres más agresivas o las que toman mayores riesgos. Según los investigadores, esto se explicaría porque las más tímidas prestan mayor atención a sus crías en años de abundancia alimentaria.
«Es posible que las crías de madres menos arriesgadas crezcan en un entorno protegido con mayores posibilidades de supervivencia. Como los jabalíes son a menudo agresivos con sus congéneres, los jóvenes son especialmente dependientes de la protección de su madre. Pero este efecto ya no se da cuando escasea el alimento», explica Sebastian Vetter, primer autor del estudio y científico en el Research Institute of Wildlife Ecology de la universidad austriaca.
Las crías más agresivas tienen una ventaja sobre sus hermanos más tímidos en la lucha por los pezones y alcanzan antes un mayor peso
La masa corporal de las crías también influye
Vetter y su equipo también encontraron un beneficio en las hembras agresivas o atrevidas respecto a la crianza de su prole al existir una correlación entre la personalidad de los animales y su masa corporal juvenil.
Y esto tiene su explicación: las crías más agresivas tienen una ventaja sobre sus hermanos más tímidos en la lucha por los pezones y por lo tanto alcanzan antes un mayor peso, lo que les permite reproducirse antes, sobre todo en el caso de las hembras.
El trabajo destaca de esta manera que si un animal crece en buenas condiciones, puede tener un beneficio para toda la vida. “La masa corporal juvenil tiene consecuencias a largo plazo para las jabalinas e influye directamente en el éxito reproductivo de los animales adultos”, dice Vetter.
En función de las condiciones ambientales, las diferentes personalidades tienen un efecto positivo o negativo en la cría y la reproducción. Así, los rasgos de personalidad que son útiles en una situación pueden presentar una desventaja en otra. «En los animales como el jabalí, que experimentan condiciones ambientales muy diferentes de año en año, esta variabilidad también contribuye al mantenimiento de diferentes personalidades en una población», concluye el científico.
Referencia bibliográfica:
Sebastian G. Vetter, Constanze Brandstätter, Marie Macheiner, Franz Suchentrunk, Hanno Gerritsmann and Claudia Bieber. “Shy is sometimes better: personality and juvenile body mass affect adult reproductive success in wild boars, Sus scrofa» Animal Behaviour 115: 193-205 mayo de 2016