Según datos de asociaciones como el Centro de Transporte Sustentable EMBARQ, los habitantes de la ciudad de México están acostumbrados a invertir cantidades de tiempo que pueden sobrepasar dos horas, en el trayecto de su hogar hasta su lugar de trabajo y viceversa. Este tiempo perdido provoca millonarias pérdidas por concepto de horas-hombre, de acuerdo con datos de dicha asociación.
Como parte de las posibles soluciones al problema, matemáticos de la UAM Iztapalapa (UAM-I) desarrollaron diversos estudios para optimizar la dinámica del flujo de las personas en numerosos puntos de la ciudad de México. Para ello, estudiaron algunos de los lugares más susceptibles al alto flujo peatonal, como el Sistema de Transporte Colectivo, así como numerosas calles y avenidas de la metrópoli.
Uno de los subproyectos, llevado a cabo por la doctora María Luisa Sandoval, empleó ecuaciones diferenciales para simular la dinámica de las personas en el interior de las estaciones del Metro de la ciudad de México. Posteriormente, esos datos fueron analizados por tecnologías computacionales que realizan una simulación precisa del comportamiento dinámico del trayecto de las personas dentro de ese sistema de transporte.
“A través de ese desarrollo matemático se logró establecer una base de conocimiento para realizar tomas de decisiones como: el lugar adecuado para colocar contenciones peatonales, los puntos más precisos para colocar máquinas expendedoras de boletos o estaciones de recarga, así como señalizaciones adecuadas para manipular el tráfico peatonal. Actualmente se ha transferido ese conocimiento al propio Sistema de Transporte Colectivo”, destacó Joaquín Delgado Fernández, titular del proyecto e investigador de la UAM-I.
De acuerdo con Delgado Fernández, los especialistas de la UAM-I también han focalizado sus esfuerzos en estudiar el comportamiento de los usuarios del transporte público y privado en la ciudad. Tal es el caso de la investigación de Lorenzo Héctor Juárez, quien estimó los volúmenes de automóviles y personas que viajan diversas distancias de un punto a otro, por ejemplo, del hogar a su trabajo, y realizó las modelaciones matemáticas correspondientes.
En palabras de Delgado Fernández, la información del flujo tanto de las personas como de los vehículos que recorren la ciudad de México puede contribuir a la solución de problemas de tránsito a gran escala. De esa forma, agregó, resulta más fácil establecer criterios y tomar medidas en aras de agilizar el traslado de millones de personas en la ciudad.
El investigador de la UAM-I refirió que esa casa de estudios también ha trabajado en el desarrollo de un micro-simulador de tráfico de trenes y pasajeros capaz de determinar las condiciones de contingencia o saturación del Metro de la ciudad, así como la determinación de las causas que podrían afectar el flujo de ese sistema de transporte. “El proyecto, a cargo de la doctora Patricia Saavedra, identifica problemas como la saturación por accidentes o la detención de puertas por parte de los ambulantes”, agregó el doctor Delgado Fernández.
El también Jefe del Departamento de Matemáticas de la UAM-I hizo hincapié en que este tipo de investigaciones buscan construir un nuevo puente de comunicación entre la matemática pura y la aplicada, para que la ciencia matemática logre atender las necesidades del entorno social. Agregó que actualmente a nivel mundial se construye un nuevo paradigma del matemático, lo cual exige un perfil de formación más amplio pero con bases firmes en la matemática.