Para el 2050 habrá tres monedas hegemónicas, el dólar, el euro y el yuan chino

Los economistas e investigadores estiman que para el año 2050 el mundo económico será multipolar, esto es, no habrá un centro hegemónico, afirmó Jorge Luis Solano Uscanga, académico en la Facultad de Antropología de la Universidad Veracruzana (UV), durante la conferencia “Indagaciones sobre la turbulencia de la globalización”.

Durante su participación en el seminario “China y los límites del desarrollo del capitalismo histórico: reflexión y discusión en torno a la obra de Giovanni Arrighi”, mencionó que el sistema capitalista actual está en etapa senil y de decadencia, lo que hace difícil que se repita la hegemonía económica.

Al ser cuestionado si Estados Unidos (EU) repetiría su hegemonía como centro económico después de concluida la crisis, dijo de forma categórica que es poco probable, ya que entró en una etapa de decadencia producto del endeudamiento que se agravó con el fracaso de la guerra contra Irak, que alcanzó un gasto de un billón de dólares, por lo tanto está en quiebra.

 “Ante esta situación de desorden, casi todos los analistas de sistemas mundiales, economía mundial y teoría de globalización, coinciden que es muy poco probable que EU repita, su decadencia es muy profunda”, externó.

Prosiguió al explicar. “El sistema nervioso de la globalización es el sistema financiero, y el sistema monetario al manipular el dólar manipula toda la economía mundial, entonces va a defender con uñas y dientes esa referencia”.

Respecto a si China será el próximo centro hegemónico, Solano Uscanga mencionó que ningún especialista ve al país asiático como el nuevo centro de la economía mundial, dado que al ser acelerados su crecimiento y modernización, el tejido social resultó afectado.

Finalmente, el investigador destacó que la tendencia marca que para 2050 en el mundo se aplicará un sistema multipolar, esto es, que serán tres las monedas fuertes: la norteamericana, la europea y la china.

Teoría de los ciclos económicos
Arrighi, Braudel y Wallerstein estudiaron y perfeccionaron su enfoque sobre la Teoría de los ciclos del capitalismo –que consta de tres etapas– y estiman que el proceso completo tiene una duración de 100 años.

El Ciclo A, denominado de crecimiento o hegemonía política, es el momento en que la nación inicia su expansión en los alrededores, para garantizarse como centro hegemónico. Mientras que en el Ciclo B se da una disputa por la hegemonía, que consiste en sacar del mercado a las naciones débiles, integrar la economía y fortalecer el Estado.

“Para Arrighi, esta etapa es la del otoño capitalista… Hay una gran disputa por el centro, hay una relativa decadencia del centro que generalmente se resuelve con guerras de 30 años”, indicó Solano Uscanga.

El Ciclo C apuesta por la globalización e incluso por la especulación para mantener el proceso de acumulación y así darle paso a un nuevo Ciclo A.

Por último, concluyó que el capitalismo no se desarrolló en China porque el Estado es fuerte; se conservaron las clases dominantes; no hubo feudalismo ni esclavismo, todo esto derivó en un sistema político, social y económico “muy estable”; refirió que “no es socialismo el sistema económico aplicado en China, sino un colectivismo burocrático”.

Cabe mencionar que el evento fue coordinador por el Centro de Estudios China-Veracruz, la Asociación Mexicana de Estudios del Trabajo, el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales (IIH-S), el Colegio de Veracruz, así como por las facultades de Sociología y Antropología.