A pesar de que los humanos y los chimpancés somos muy parecidos física y fisiológicamente, los simios tienen una fuerza que sobrepasa a la humana dos o tres veces. Es conocido que el sistema muscular de los chimpancés es igual al humano, pero existe una ligera diferencia que podría explicar su fuerza.
Las fibras musculares de los mamíferos tienen puntos de conexión con el hueso, lo cual permite tensionarlos e imprimir fuerza a los movimientos, pues resulta que los chimpancés tienen estos puntos de conexión en diferentes posiciones, lo cual permite que sus músculos resistan más tensión.
Otra posible explicación es que las fibras musculares de los simios son más densas y pueden utilizar la mayor parte de ellas, a diferencia de los humanos, que sólo usamos unas cuantas fibras en cada movimiento. Otro aspecto interesante es que aunque un humano haga mucho ejercicio, proporcionalmente, no alcanza a superar la fuerza del chimpancé.