Actualmente la biotecnología ofrece una opción para regenerar órganos o tejidos que sufren lesiones graves o irreversibles. Se trata de soportes biosintéticos, reemplazos elaborados con células madre que al ser extraídas del mismo paciente facilitan la aceptación del injerto por el organismo.
Estos soportes se han implantado en México desde 2003. La iniciativa es de Atlántida Raya Rivera, uróloga pediatra del Hospital Infantil de México, adscrito a la Secretaría de Salud.
La científica mexicana tomó una maestría en ingeniería de tejidos en Estados Unidos; a partir de ella –dijo– inició en 2001 un proyecto de reconstrucción de órganos y fundó el Laboratorio de Ingeniería de Tejidos en el Hospital Infantil, institución pionera en en intervenciones quirúrgicas de este tipo a nivel nacional e internacional.
Raya Rivera aseguró que cerca de 15 niños y seis adultos se han visto beneficiados con estos soportes biosintéticos. Informó que esta innovación biotecnológica ha ayudado a reconstruir el tracto urinario y genital principalmente de infantes, en quienes ha enfocado sus investigaciones en razón de su especialidad.
«No hemos tenido rechazo ni reacción inflamatoria; todos han aceptado el tejido finalmente son células de ellos” puntualizó.
Explicó que anteriormente si existía una lesión en la uretra se le colocaba una parte de otro tejido vecino o proveniente de la mucosa bucal, aunque dijo que la funcionalidad no era “la ideal” y existía la posibilidad de rechazo.
Agregó que este tipo de implantes son rutinarios en el Hospital Infantil. “Ya que no utilizamos técnicas anteriores, ésta es mejor que cualquiera de las opciones que teníamos antes”.
Proyecto apoyado por tres universidades del país
Raya Rivera precisó que los soportes son construidos con biomateriales a fin de obtener mejores resultados al facilitar la interacción con las células y los procesos biológicos del organismo.
Expuso que los biomateriales y mejoras en los soportes se consiguieron con la colaboración de las universidades Autónoma Metropolitana (UAM), Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).
“Con su apoyo la biología, biotecnología y biomedicina trabajan en conjunto” apuntó.
Añadió que esta iniciativa también es apoyada por Anthony Atala, del Instituto Wake Forest de Medicina Regenerativa, quien fue el profesor de la especialista cuando estudió la maestría en Boston.
Hacia nuevos avances
La especialista refirió que aún faltan investigaciones para lograr un injerto “perfectamente igual al tejido normal”, pero destacó que nuevas aplicaciones clínicas y tecnológicas se encuentran en desarrollo.
Al respecto mencionó que el Cinvestav trabaja en proyectos de biología molecular que pretenden desarrollar nuevos soportes adecuados a huesos, piel, esófago, esfínteres urinarias y anales.
Raya Rivera afirmó que los costos de dicha investigación son elevados, por lo que para reducir gastos contempla la fabricación de sustancias requeridas como el factor de crecimiento. Reconoció que en ocasiones el financiamiento del gobierno sólo alcanza para costear los materiales básicos y el capital es insuficiente.
Adelantó que el siguiente proyecto contemplado es el campo de regeneración de tejidos en riñón. “Estamos a punto de echarlo a andar y cerca de la aprobación para desarrollarlo”.
“Este trabajo es viable; debería de ser utilizado y tomado en cuenta por otros institutos para que hagan investigación en otros campos” finalizó la especialista.