Tecnalia trabaja en el proyecto SECUREMETRO desarrollando e investigando la incorporación de materiales de protección que nos permitirán viajar con mayor seguridad ante alguna catástrofe.

Los atentados terroristas en los trenes de cercanías de Madrid en 2004, y al año siguiente, en el metro de Londres, pusieron de manifiesto la vulnerabilidad de los pasajeros ante los ataques en medios de transporte en los que es más difícil implantar controles de seguridad para detectar bombas como los que se llevan a cabo en los aeropuertos.

Tras aquellos atentados se puso en marcha SecureMetro, un proyecto internacional cofinanciado por la Comisión Europea (CE) para mejorar la seguridad en metros y ferrocarriles. Tras tres años de trabajo, los investigadores y empresas de Reino Unido (Newrail), España (Tecnalia, Metro de Madrid, Maxam-Expal, FFE, Sunsundegui), Francia (RATP, IFSTTAR, Bombardier) e Italia (STAM, IAI) que participan en este proyecto ya tienen listo un prototipo de vagón de tren que incluye materiales y sistemas de protección más resistentes a las explosiones y ayudará a reducir el efecto de la onda expansiva y el número de fragmentos secundarios generados si se produjera un nuevo atentado terrorista.

Tecnalia ha trabajado con una importante variedad de soluciones de materiales seleccionados para su estudio y experimentación en SECUREMETRO. Los materiales se han seleccionado entre las soluciones disponibles en varios mercados (militar, seguridad, aeronáutica,  construcción) pero también se han incluido desarrollos propios de Tecnalia como es el caso de materiales cerámicos de elevadas prestaciones desarrollados originalmente por Tecnalia para aplicaciones de blindajes de personal y aeronaves.  Dentro del análisis de los materiales, Tecnalia ha enfocado una parte de su actividad en la protección de las ventanas. Estas fueron hechas de vidrio laminado (a excepción de las ventanas de emergencias estándar), de las cuales varias estaban protegidas con películas poliméricas y capas adhesivas adicionales para reducir el número de fragmentos y así minimizar el riesgo de que se separen completamente del vehículo durante una explosión.

Tecnalia ha tenido la responsabilidad de sensorizar los 16 ensayos explosivos realizados a más de 50 paneles con materiales seleccionados para este proyecto y también de sensorizar la explosión en el vagón, con el objetivo de poder estudiar con más detalle los efectos de las explosiones.  Junto con los sensores se han utilizado cámaras de alta velocidad añadiendo información visual de los detalles de dichas explosiones.

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