Después de que desde el pasado 7 de abril, el telescopio espacial Kepler entró a trabajar en modo de emergencia (EM), los ingenieros de operaciones de la misión han recuperado con éxito el control, utilizando la Red de Espacio Profundo (Deep Space Network -DSN-), un conjunto de antenas que tiene más de 50 años trabajando.
La alarma se encendió durante un contacto programado el jueves 7 de abril, cuando los ingenieros de operaciones de la misión descubrieron que el telescopio espacial Kepler estaba por lo menos desde 36 horas antes en modo de emergencia (EM), el modo operativo más bajo del telescopio espacial, lo cual significaba que todas sus funciones estaban desactivadas.
Ese 7 de abril estaba programado el inicio de la Campaña 9 del telescopio espacial.
Esto fue sorpresivo, porque el último contacto anterior con el telescopio espacial Kepler fue el 4 de Abril y en ese momento estaba en buen estado y funcionando correctamente.
La misión con la nave ubicada a 120 millones de kilómetros de la Tierra también entró en emergencia, con prioridad para recuperar el contacto y el control.
Durante el modo de emergencia, las señales tardaban más de 13 minutos en llegar y regresar, algo que complicaba la comunicación.
El domingo 10 de abril la nave espacial alcanzó un estado estable con la antena de comunicaciones apuntando hacia la Tierra, permitiendo que los datos de telemetría y de eventos históricos fuesen descargados en tierra.
El telescopio seguía funcionando en el modo de consumo de combustible más bajo y seguía sin conocerse la causa de la falla.
Las primeras teorías apuntaron a un fallo en las ruedas de reacción giroscópicas, que fueron las causantes del primer fallo en 2013, algo que podría coincidir con el arranque de la Campaña 9 el pasado 7 de abril, donde se hizo contacto con el Kepler
Los equipos de la Red del Espacio Profundo de la NASA cancelaron el modo de emergencia de la nave espacial, devolviendo las comunicaciones terrestres con la Red de Espacio Profundo a su programación normal.
La Red de Espacio Profundo es el sistema de telecomunicaciones más grande y sensible jamás creado y consiste en tres grandes estaciones terrestres que tienen más de 50 años. Una de ellas está en California, la otra en Australia, y la tercera en Robledo de Chavela, en Madrid. Están separadas entre sí por 120 grados, lo que significa que la NASA puede conectar con cualquiera de sus naves en misiones espaciales en cualquier momento del día. Misiones que deben competir por el acceso a la red.
Ahora, una vez que los datos están en tierra, el equipo va a evaluar a fondo todo los sistemas de a bordo para garantizar que la nave espacial está lo suficientemente sana como para volver al modo de ciencia y comenzar la campaña de observación de la misión K2, denominada Campaña 9. Se prevé que este chequeo continúe durante la semana.
Después de casi ocho años de operación, el Kepler ha sido una herramienta primordial en la investigación, exploración y descubrimiento de exoplanetas, que de vez en cuando también sirve para mostrarnos maravillosos fenómenos astronómicos, de ahí su importancia para el mundo astronómico, pero podemos estar tranquilos, la NASA acaba de anunciar que la sonda ha sido rescatada y está en modo operativo nuevamente, aunque no en su totalidad.
El Kepler terminó su primera misión en 2012, para 2014 arrancaría una nueva misión extendida, es decir, que no estaba en los planes, esto después de que en 2013 se presentará el más grande de sus fallos, donde científicos de la NASA tuvieron que reparar el telescopio y otros factores de la nave a distancia.
La misión K2 debió iniciar su campaña 9 la cual finalizará el próximo 1 de julio, momento en el que se había programado determinar si seguía operando para descubrir nuevos exoplanetas y supernovas, o se daba por finalizado su paso por el espacio.