Frenar los crímenes contra periodistas, llamado de la Feria Universitaria del Libro de la U. de Hidalgo

La Feria Universitaria del Libro (FUL 2015) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, arrancó con el llamado de su presidente, Marco Antonio Alfaro, a frenar los crímenes, la persecución y la violencia contra periodistas. Alfaro consideró que el llamado a frenar la violencia contra periodistas, es un tema obligado para cualquier Universidad y Feria Literaria, principalmente la FUL 2015 que este año tiene como tema central la justicia.

“Esta es una gran oportunidad de oxigenar el ambiente cotidiano que se hace cada día más apetecible para tener una sociedad y autoridades más sensibles, más justas. No más crímenes a periodistas, no más persecuciones, no más violencia, vamos todos a leer”, convocó el presidente de la FUL, al tiempo que el Rector Humberto Verás Godoy subrayó la responsabilidad de las universidades como formadoras de conciencia.

Durante la inauguración de la 28 edición de la FUL celebrada en el Polideportivo Carlos Martínez Balmori de la UAEH, la máxima autoridad de esta Universidad estimó que esta clase de eventos tienen la responsabilidad de contribuir a la formación de hombres y mujeres de bien, que con sus acciones generen un mundo de mayor justicia y equidad, “la FUL es el espacio ideal para avanzar en la construcción de la vida de hombres y mujeres de bien”, insistió.

A su vez, Raúl Padilla López, presidente de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, respaldó la idea de que algunos tipos de violencia se relacionan con el nivel de lectores de cada país y recordó que lamentablemente México, como otros países de Latinoamérica, presentan niveles muy bajos de lectura e insistió en que incrementar el hábito de la lectura genera sociedades más conscientes, más civilizadas y con mayores ingredientes de paz y armonía.

Alfaro stuvo acompañado por el embajador de la India, Sujan Chinoy;del rector de la UAEH, Humberto Veras Godoy; del rector de la Universidad de Sinaloa, Juan Eulogio Guerra Vieyra y el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma,