La princesa que decidió ser periodista, fue el título que acuñó el escritor Juan Villoro para estar a la altura de los emotivos e hilarantes reconocimientos que hicieron de Elena Poniatowska el caricaturista Rafael Barajas “El Fisgón” y la actriz Jesusa Rodríguez en la Feria Internacional del Libro (FIL) 2012.

         Con motivo de celebrar sus 80 años de vida, el comité organizador de la FIL, presidido por Raúl Padilla, le rindió un homenaje que inició con las palabras del mismo Padilla: “París la vio nacer como princesa en 1932 y México convertirse en militante de izquierda, escritora y periodista, con una brillante obra que abarca más de 50 títulos” que la convierten “en referencia obligada de la mexicanidad a nivel mundial”.

         Hasta ahí llegó la formalidad ya que cuando tocó el turno a “El Fisgón”, el monero presentó en viñetas la historia “La princesa Elenita”, reconociendo el plagio a conocidos personajes con la finalidad de narrar un cuento “para niños, de princesas, que me plagié directamente de Walt Disney”, frase que generó la primera carcajada del público que abarrotó la sala “Juan Rulfo”, duplicado por las personas que no pudieron entrar al auditorio y lo siguieron desde el vestíbulo.

         “Todo parecía augurar un futuro venturoso a Elenita, pero la ceremonia fue interrumpida por el hada malévola que estaba furiosa por que no había sido invitada –cualquier parecido del hada con alguna dirigente magisterial es mero accidente– y le lanzó la siguiente maldición: ‘No puedo deshacer los dones que le han sido otorgados a esta princesa; ella será inteligente y bonita, tendrá buena pluma y será amada por su pueblo, pero la condeno a vivir en un país del tercer mundo’.

”Y agregó, ‘No sólo no gobernará, sino que vivirá enfrentada a príncipes mezquinos, crueles y tontos, tendrá un profundo sentido de la justicia pero esto hará que sufra las injusticias ajenas y la obligará a actuar con honestidad y congruencia toda su vida’.”

         Elena le dio voz a los que no la tenían –prosiguió–, a los pobres, a los oprimidos, a los disidentes, a los inconformes.

         “La gente del país de ‘El Indio’ Fernández nunca olvidó que fue la voz de una dama menuda la que puso en entredicho el discurso oficial y cuentan que, cuando estaba solo en su exilio, el gran asesino musitaba entre dientes: esa princesita era hermosa, pero salió más cabrona que bonita.”

         Jesusa Rodríguez comentó: “Estamos en el umbral de una transición importante en la que al fin México se pondrá a la vanguardia mundial en materia de telecomunicaciones, pues a partir del primero de diciembre los mexicanos podremos ver el noticiero y la telenovela al mismo tiempo y en el mismo canal”.

         Citó el comentario de Poniatowska en el noticiero de Joaquín López Dóriga: “La televisión rige el destino de un país, vuelve héroes a los conductores de noticieros, en verdugos a los manifestantes y a los huelguistas, y en primeras damas a las actrices de telenovela”, y agregó: “Cito por su nombre para evitar que se me juzgue injustamente por plagio como a Sealtiel Alatriste o que algún jurado me otorgue el año próximo el premio de la FIL”, comentario que generó una ovación de la audiencia.

         “Quisiera aprovechar esta ocasión para sugerirle, con todo respeto, al señor presidente electo, Enrique Peña Nieto –por cierto gran protagonista de la FIL 2011–, la posibilidad de tomar en cuenta en su próximo gabinete a Maxine Woodside para ocupar el cargo como presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, mismo que ha sido presidido por mujeres brillantes como Sari Bermúdez o Consuelo Saizar.

         “En sentido opuesto a los conquistadores, Elena vino a México a dejarse seducir por el país y como si fuera un recién nacido, lo abrazó y lo apapachó y México se quedó dormido en sus brazos.”

         Elena ha vivido a plenitud sus 80 años y es observadora fiel de lo que pasa en la tierra y en el cielo, por eso se casó con un astrónomo, señaló la actriz.

         A continuación, Juan Villoro expresó: “Estamos ante una historia de una princesa que decidió ser periodista, acaso como los grandes mitos, es que las princesas suelen ser protagonistas absolutas y uno de los grandes descubrimientos que puede hacer es que existen los otros, más allá de palacio hay gente que puede tener razón.

         ”Es lo que hizo Elena Poniatowska: salir a darle la razón y la voz a los demás, entenderse a sí misma a partir de los otros, quiso reconocer las razones profundas de los demás.”

         Finalmente, la homenajeada dio un breve mensaje de agradecimiento en el que se pronunció por defender “lo que es bueno para nuestro país. Defender a la UNAM, a la FIL de Guadalajara, que es la más importante del mundo junto con la de Frankfurt y Buenos Aires gracias a la expectación que genera” y subrayó: “Debemos reconocer que la cultura no puede estar al margen de la ética”, haciendo referencia al premio otorgado a Alfredo Bryce Echenique, lo que generó una ovación mayor.

         “Cada quien debemos hacer nuestra lista para salvar a México de sus desechos, de los 80 mil muertos que ha dejado esta guerra contra el narcotráfico, de los niños que abandonan la escuela, de la televisión que hace presidentes. Que todos sepamos que debemos seguir leyendo y ser mejores personas”, concluyó Poniatowska.

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