Vista de la puesta de sol junto a la iglesia de Los Remedios, San Pedro Cholula, Puebla, México- Francisco Guasco, Agencia Enfoque

Vista de la puesta de sol junto a la iglesia de Los Remedios, San Pedro Cholula, Puebla, México- Francisco Guasco, Agencia Enfoque


Cuando sean las 15:54 horas UTC (Tiempo Universal Coordinado) del 21 de junio, llegará el “Solsticio de Junio”, cuando el Sol esté en su punto más alto de todo el año y se tiene la mayor duración del día en el año, en el Hemisferio Norte. Ésta estación durará 93 días y 15 horas, hasta el 23 de septiembre.

El Solsticio de Junio en el hemisferio norte es llamado “Solsticio de Verano” y marca el paso de la Primavera al Verano. En el hemisferio sur en cambio será el “Solsticio de Invierno”, terminando el otoño para comenzar el invierno.

En México (y en buena parte de América Latina que tiene el mismo horario) el Solsticio llegará a las 10 horas con 54 minutos, y se calcula que en México ese día tenga 13 horas y 25 minutos de luz de sol.

Por la inclinación de la Tierra en el hemisferio norte -el polo Norte se encuentra más inclinado hacia el Sol que durante cualquier otro día del año- tendremos el día más largo del año, por lo cual, a partir de esta fecha los días comienzan a acortarse, hasta llegar al Solsticio de Diciembre, cuando se tiene el día más corto, y que este año será el 21 de diciembre.

En cambio en el hemisferio sur se tendrá el día más corto del año. En contraposición en esta parte del planeta al mediodía el sol alcanza el punto más bajo de todo el año, y a partir de esta fecha los días comienzan a alargarse.

En esta fecha los rayos solares caen perpendiculares sobre el paralelo 23,5° norte (latitud de la Habana), y durante varios días su altura máxima al mediodía no cambia; a esta circunstancia se la llama solsticio (“Sol quieto”, es una de sus múltiples definiciones) de verano.

El solsticio de junio se produce sobre el también llamado “Trópico de Cáncer”, porque hace unos cuatro mil años, durante el solsticio, el Sol tenía como fondo las estrellas de Cáncer. Pero en la actualidad, el Sol no se encuentra en esta constelación en el solsticio de junio, ni tampoco en la vecina Gemini, lo cual sí ocurrió durante los últimos 2000 años. Si pudiésemos ver las estrellas de fondo de este día, encontraríamos que el Sol está cercano a la frontera entre las constelaciones Gemini y Tauro, moviéndose cada año hacia Tauro, lugar al cual recurrirá en los próximos dos mil años. Por tal razón, en el futuro sería mejor llamarlo Trópico de Tauro.

En la mitología azteca, el Sol es llamado Tonatiuh, y el 21 de junio parece detenerse por espacio de unos días, dando significado a la palabra Solsticio ‘”el Sol se detiene’”.

Un hecho circunstancial no relacionado con las estaciones se da también en esta época: el día del afelio, es decir, el día en que el Sol y la Tierra están más alejados entre sí a lo largo del año, siendo la distancia de algo más de 152 millones de km, unos 5 millones de km más que a principios de enero, cuando la distancia al Sol alcanza su mínimo anual. Es este mayor alejamiento al Sol la causa de que la Tierra se mueva más lentamente a lo largo de su órbita elíptica durante el verano (según la conocida como segunda ley de Kepler) y por lo tanto la duración de esta estación sea mayor que otras.

La fecha es también una fiesta de la fertilidad en la que se realizan celebraciones ligadas a la cosecha, tanto en el plano material como espiritual. Se entrelazan con esta fecha la celebración de San Juan Bautista, quien nació el 24 de junio y en muchos lugares inician las fiestas el 21 de junio, precisamente.

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